7/08/2017, 17:50
—¿Alejarnos lentamente? ¿Es que no me has visto? ¡No puedo alejarme lentamente!, demonios, si hubiera podido alejarme ya lo habría hecho. —Replicó el hombre, ignorando el hecho de que yo solo intentaba ayudarlo—. Si puedes tratar esto, hazlo ahora, no creo que tenga unos minutos.
Ciertamente el afectado tenía razón y era que no me había percatado de la magnitud de su herida hasta que constaté el charco de sangre que estaba en el suelo y sus ropas, debía actuar rápido. —Lo atenderé rápidamente, necesito que colabore conmigo, mantenga la calma.— Para cuando expresé esas palabras ya me encontraba un costado de él, arrodillado a la izquierda de su dorso y con ambas manos apoyadas levemente en donde tenía la herida. Mis palmas empezaron a brillar con una luz tenue de color verdeazul.
El resplandor fue ganando potencia mientras pasaban los segundos, mi primer objetivo sería detener la hemorragia causada por las garras del león, pero también sentía la presión de la amenaza, en cualquier momento la bestia podía voltearse y arremeter contra mi o rematar al hombre.
—¡Por favor! no hieran a Shiro... ¡Es lo único que tengo!
"¿Es el dueño?" Seguí en mi labor, pero no me terminaba de cuadrar la situación, o él había hecho algo para que el león se enfureciera. —Mantenga la calma por favor, trate de no esforzarse.— Dije de la mejor manera posible para que él no se sintiera reprochado.
Seguí cumpliendo con mi labor de detener la hemorragia y causar una sensación de confort al herido, pero no con la guardia baja, sino que echaba un ojo a su agresor de vez en cuando para ver como estaba la situación. Sí Daigo y Koko decidían agredir a la pantera sería su decisión, por mi parte no contaba con nada para apresar al peliblanco, pero luego recordé el hilo shinobi que tenía, sería cuestión de mantener en condiciones estables al afectado y luego minimizar a la bestia.
Ciertamente el afectado tenía razón y era que no me había percatado de la magnitud de su herida hasta que constaté el charco de sangre que estaba en el suelo y sus ropas, debía actuar rápido. —Lo atenderé rápidamente, necesito que colabore conmigo, mantenga la calma.— Para cuando expresé esas palabras ya me encontraba un costado de él, arrodillado a la izquierda de su dorso y con ambas manos apoyadas levemente en donde tenía la herida. Mis palmas empezaron a brillar con una luz tenue de color verdeazul.
El resplandor fue ganando potencia mientras pasaban los segundos, mi primer objetivo sería detener la hemorragia causada por las garras del león, pero también sentía la presión de la amenaza, en cualquier momento la bestia podía voltearse y arremeter contra mi o rematar al hombre.
—¡Por favor! no hieran a Shiro... ¡Es lo único que tengo!
"¿Es el dueño?" Seguí en mi labor, pero no me terminaba de cuadrar la situación, o él había hecho algo para que el león se enfureciera. —Mantenga la calma por favor, trate de no esforzarse.— Dije de la mejor manera posible para que él no se sintiera reprochado.
Seguí cumpliendo con mi labor de detener la hemorragia y causar una sensación de confort al herido, pero no con la guardia baja, sino que echaba un ojo a su agresor de vez en cuando para ver como estaba la situación. Sí Daigo y Koko decidían agredir a la pantera sería su decisión, por mi parte no contaba con nada para apresar al peliblanco, pero luego recordé el hilo shinobi que tenía, sería cuestión de mantener en condiciones estables al afectado y luego minimizar a la bestia.