16/08/2017, 18:03
No tardó en llegar donde le había indicado el señor al que había preguntado. La calle que le había dicho que siguiera se acababa de acabar. Ante él se alzaba ¿la Torre de Ocio?
A cada lado del muchacho había una casa tradicional de la villa, hecha de madera y bambú, a cada cual más tradicional que el anterior. Un poco más atrás en esa misma calle había un conocido dojo donde iban los shinobis que tenían días libres pero no ganas de descansar. Sobretodo era popular por estar tan cerca de la Torre de Ocio.
O la dirección que había en el pergamino era donde estaba la tienda y el cliente se había equivocado o la casa de aquel hombre al que debía pedirle la indumentaria estaba exageradamente cerca para su conveniencia.
A cada lado del muchacho había una casa tradicional de la villa, hecha de madera y bambú, a cada cual más tradicional que el anterior. Un poco más atrás en esa misma calle había un conocido dojo donde iban los shinobis que tenían días libres pero no ganas de descansar. Sobretodo era popular por estar tan cerca de la Torre de Ocio.
O la dirección que había en el pergamino era donde estaba la tienda y el cliente se había equivocado o la casa de aquel hombre al que debía pedirle la indumentaria estaba exageradamente cerca para su conveniencia.