2/09/2017, 22:55
Una vez que expuso sus razones y datos de importancia, se quedó a la expectativa de como reaccionaria quien tenían en frente los genin de Uzushio, giro su cabeza al oír hablar al peliblanco y sus ojos se abrieron ligeramente cuando el Hakagurē manifestó su identidad<<¿Qué? ¿Shinobi de Uzushio?>> eso sí que era una gran casualidad, dos ninjas de Uzushiogakure reunidos sin saber siquiera que eran compatriotas, se le hacía extraño que teniendo una edad aproximada a la de él, su rostro no se le hiciera familiar en lo más mínimo, si bien en no conocía a prácticamente nadie de la aldea, si tenía un conocimiento general y habría visto varias veces a los que se graduaron en su mismo año o uno cercano, aunque eso lo dejaría para más adelante, ni siquiera sabía si lo que había dicho era fidedigno.
Al finalizar las palabras de los dos genin, quien los indagaba coloco la lamparilla en la posición original, para después examinarlos nuevamente con la vista.
Haru se sentía de verdad presionado, como si hubiera un bombardeo dentro de él a la espera de la resolución de quien los emplearía, aunque trataba por todos los medios de no demostrarlo, la impaciencia estaba comenzando a desbordarlo y comenzó a mover sus pies en un intento de relajarse.
─ Si, creo que me servirán…─ expreso mientras daba unos pasos.
Un suspiro bastante disimulado se le escapó al oír lo que les habían dicho, sin duda fue un gran alivio escuchar eso<<Después de todo lo que pasamos al menos no será en vano>>
Tan solo unos instantes después, el hombre procedió a presentarse, luego de colocarse un puro y comenzar a inundar aún más la habitación con ese característico aroma, resulto ser que él mismo que había convocado a todos ahí, era quien se encargaría de entrevistarlos, fue una gran sorpresa para Haru, estaba frente un magnate del mundo del espectáculo, de seguro solo habría un par de personas en todo Ōnindo que no reconocerían el nombre de Yamamasu Setsujiro, el dueño y fundador de una de las compañías más lucrativas del continente, a Haru no le llamaba mucho la atención esa clase de entretenimiento, solo la música, pero aun así, Setsujiro era una personalidad destacable, pues aunque a él no le interesara mucho, en su mismo clan había personas que asistían a los espectáculos de su compañía.
Al parecer no era el único sorprendido por la presencia de un hombre de tal reputación en aquel sitio, ya que Kōtetsu incluso manifestó su asombro ante aquella situación, Haru también pensaba que aquí solo habría un representante de Setsujiro, nunca se esperó que estuviera él mismo en persona.
Setsujiro no parecía ser alguien que confiara mucho en otras personas, era la viva representación del dicho “Si quieres algo bien hecho hazlo tú mismo”, aunque Haru discrepaba un poco con esa forma de pensar, él prefería confiar en los demás, claro que solo cuando hayan ganado su confianza, pero bajo ninguna circunstancia le llevaría la contra a ese hombre, menos ahora que sabía de quien se trataba, aunque le parecía un poco gracioso el hecho de que dijera que el mismo se encargaría y se ensuciaría las manos de ser necesario, entonces ¿para que estaban ellos ahí?
─ Supongo que si─ respondió solo para no llevarle la contra, si antes no lo había hecho, ahora que sabía con quién estaba tratando menos.
Al finalizar las palabras de los dos genin, quien los indagaba coloco la lamparilla en la posición original, para después examinarlos nuevamente con la vista.
Haru se sentía de verdad presionado, como si hubiera un bombardeo dentro de él a la espera de la resolución de quien los emplearía, aunque trataba por todos los medios de no demostrarlo, la impaciencia estaba comenzando a desbordarlo y comenzó a mover sus pies en un intento de relajarse.
─ Si, creo que me servirán…─ expreso mientras daba unos pasos.
Un suspiro bastante disimulado se le escapó al oír lo que les habían dicho, sin duda fue un gran alivio escuchar eso<<Después de todo lo que pasamos al menos no será en vano>>
Tan solo unos instantes después, el hombre procedió a presentarse, luego de colocarse un puro y comenzar a inundar aún más la habitación con ese característico aroma, resulto ser que él mismo que había convocado a todos ahí, era quien se encargaría de entrevistarlos, fue una gran sorpresa para Haru, estaba frente un magnate del mundo del espectáculo, de seguro solo habría un par de personas en todo Ōnindo que no reconocerían el nombre de Yamamasu Setsujiro, el dueño y fundador de una de las compañías más lucrativas del continente, a Haru no le llamaba mucho la atención esa clase de entretenimiento, solo la música, pero aun así, Setsujiro era una personalidad destacable, pues aunque a él no le interesara mucho, en su mismo clan había personas que asistían a los espectáculos de su compañía.
Al parecer no era el único sorprendido por la presencia de un hombre de tal reputación en aquel sitio, ya que Kōtetsu incluso manifestó su asombro ante aquella situación, Haru también pensaba que aquí solo habría un representante de Setsujiro, nunca se esperó que estuviera él mismo en persona.
Setsujiro no parecía ser alguien que confiara mucho en otras personas, era la viva representación del dicho “Si quieres algo bien hecho hazlo tú mismo”, aunque Haru discrepaba un poco con esa forma de pensar, él prefería confiar en los demás, claro que solo cuando hayan ganado su confianza, pero bajo ninguna circunstancia le llevaría la contra a ese hombre, menos ahora que sabía de quien se trataba, aunque le parecía un poco gracioso el hecho de que dijera que el mismo se encargaría y se ensuciaría las manos de ser necesario, entonces ¿para que estaban ellos ahí?
─ Supongo que si─ respondió solo para no llevarle la contra, si antes no lo había hecho, ahora que sabía con quién estaba tratando menos.
- Hablo-
<<Pienso>>