16/10/2017, 02:17
Los rayos y relámpagos del cielo no la ayudaban para nada, es más, le resultaba molesto que justo el día en que se le ocurrió devolver aquella prenda se haya puesto así el clima, pero no hay más remedio, no podía ir y modificar el ambiente según se le antojase —lamentablemente—.
—¿Crees que en tan poco tiempo puedo hacerme con algo ilegal como eso? —le respondió manteniendo un alegre semblante—. Recuerda que también que el otro día me lo pasé en el hospital y cuidando la quemadura que me hiciste.
A pesar de estar recordando algo no muy alegre, ella parecía aún feliz. ¿Por qué? Pues para ganarse un mínimo de la confianza ajena y que le abra la puta puerta.
—¿Crees que en tan poco tiempo puedo hacerme con algo ilegal como eso? —le respondió manteniendo un alegre semblante—. Recuerda que también que el otro día me lo pasé en el hospital y cuidando la quemadura que me hiciste.
A pesar de estar recordando algo no muy alegre, ella parecía aún feliz. ¿Por qué? Pues para ganarse un mínimo de la confianza ajena y que le abra la puta puerta.