16/10/2017, 19:12
—Habla como normalmente harías con tus amigos, olvídate por un momento que soy tu superior —le respondió con firmeza.
No le agradaba que le tratasen con tanto respeto, pero tampoco le había agradado que el Uchiha intentase vanagloriarse exagerando un tanto las cosas que bien sabían, eran problemas mundanos que cualquier otro podría haber tenido. El asunto con este chico en particular era que se las había ensañado con sus hermanas y no podía permitirlo.
—Me temo que no será posible, Uchiha Datsue —respondió—. Quiero que me expliques absolutamente todo ahora mismo —concluyó.
Si permitía al Uchiha aquellos cinco minutos probablemente podría pensarse unas buenas historias algo más elaboradas y creíbles como para zafarse, seguramente se contradiría con lo que las rubias pudieran haberle contado, pero seguía prefiriendo que le dijeran la verdad y nada más que la verdad, sin adornados ni misticismos ni suspensos.
—Nunca me gustó el suspenso —aseguró, como si aquello no tuviese relación con nada y su mirada se desvió a la puerta—. O tal vez podría encerrarte en el departamento con mis hermanas, seguramente estarán como fieras enjauladas ahora mismo, si es que me entiendes —soltó una risa luego de aquel comentario, indicándole que no iba muy en serio… ¿O tal vez sí…?
No le agradaba que le tratasen con tanto respeto, pero tampoco le había agradado que el Uchiha intentase vanagloriarse exagerando un tanto las cosas que bien sabían, eran problemas mundanos que cualquier otro podría haber tenido. El asunto con este chico en particular era que se las había ensañado con sus hermanas y no podía permitirlo.
—Me temo que no será posible, Uchiha Datsue —respondió—. Quiero que me expliques absolutamente todo ahora mismo —concluyó.
Si permitía al Uchiha aquellos cinco minutos probablemente podría pensarse unas buenas historias algo más elaboradas y creíbles como para zafarse, seguramente se contradiría con lo que las rubias pudieran haberle contado, pero seguía prefiriendo que le dijeran la verdad y nada más que la verdad, sin adornados ni misticismos ni suspensos.
—Nunca me gustó el suspenso —aseguró, como si aquello no tuviese relación con nada y su mirada se desvió a la puerta—. O tal vez podría encerrarte en el departamento con mis hermanas, seguramente estarán como fieras enjauladas ahora mismo, si es que me entiendes —soltó una risa luego de aquel comentario, indicándole que no iba muy en serio… ¿O tal vez sí…?