16/10/2017, 22:53
Cuando el hombre le tomó por los hombros, Datsue supo que ya no había escapatoria alguna. Ni vuelta atrás. Se había metido en la boca del lobo y ahora toca seguir hacia adelante. Ante las palabras de ánimo de Hideo, el Uchiha se limitó a respirar hondo. «Vamos, ¡que por algo te llaman Datsue el Intrépido! ¡Entra ahí y demuéstrales lo que vale un shinobi!»
Lo malo con los pensamientos positivos, es que luego te enfrentabas a la realidad. Dos cosas que, en su experiencia, no solían coincidir. Hideo abrió la puerta y…
«La madre que me…»
Allí estaban las hermanas, embadurnadas en una especie de crema y batiendo frutas… Era como el argumento de una de esas películas que a veces veía. Al menos, el principio era idéntico. Entonces, por primera vez en mucho tiempo, no supo qué decir. Ya no sabía si quería poner pies en polvorosa, si quería quedarse o, simplemente, que fuese Hideo quien se largase.
Cuando Noemi le vio, sin embargo, se le cambió el semblante. A Koko también, aunque lo disimulaba mejor. Fue entonces cuando Hideo, ni corto ni perezoso, preguntó a su hermana si estaba la habitación ordenada.
«¿La habitación? ¡Un momento! ¿Qué demonios quiere…? ¿No será...? ¿¡No será...!?» ¡Aquello estaba siendo como en las películas!
«Ah…»
Datsue vio que se llevaba dos sillas.
«Oh…»
Datsue vio que tan solo iban a hablar. Se le cayeron los hombros, pero trató de que no se le notase en el rostro. Se sentó el último, y se removió sobre la silla, incómodo. No por el asiento en sí, sino por la situación.
Lo malo con los pensamientos positivos, es que luego te enfrentabas a la realidad. Dos cosas que, en su experiencia, no solían coincidir. Hideo abrió la puerta y…
«La madre que me…»
Allí estaban las hermanas, embadurnadas en una especie de crema y batiendo frutas… Era como el argumento de una de esas películas que a veces veía. Al menos, el principio era idéntico. Entonces, por primera vez en mucho tiempo, no supo qué decir. Ya no sabía si quería poner pies en polvorosa, si quería quedarse o, simplemente, que fuese Hideo quien se largase.
Cuando Noemi le vio, sin embargo, se le cambió el semblante. A Koko también, aunque lo disimulaba mejor. Fue entonces cuando Hideo, ni corto ni perezoso, preguntó a su hermana si estaba la habitación ordenada.
«¿La habitación? ¡Un momento! ¿Qué demonios quiere…? ¿No será...? ¿¡No será...!?» ¡Aquello estaba siendo como en las películas!
«Ah…»
Datsue vio que se llevaba dos sillas.
«Oh…»
Datsue vio que tan solo iban a hablar. Se le cayeron los hombros, pero trató de que no se le notase en el rostro. Se sentó el último, y se removió sobre la silla, incómodo. No por el asiento en sí, sino por la situación.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado