17/10/2017, 02:40
Que Koko no iba a aguantarse sin replicarle era un hecho consabido. Que Datsue, tras oírla, iba a quedarse con las ganas de rebatirla era un imposible.
—¿Y cómo pretendías que supiese que no querías darme con él? —replicó, en referencia al cocodrilo eléctrico—. Y no exageres, no eres la primera a quien le hago estallar un clon, incluso combinado con un sello explosivo, y nunca le llegué a volar los dedos a nadie, ni ninguna otra cosa.
Iba a añadir algo más, pero entonces llegó la voz de Hideo, firme pero tranquila, zanjando el tema. No solo eso, sino que achacó el problema a la supuesta baja autoestima de la kunoichi. «Uhh… Y luego soy yo quien hurga en la herida.»
Fue entonces cuando el hermano le pidió a Koko que le acompañase, desapareciendo los dos de la habitación. A dónde iban, Datsue no tenía ni la más remota idea. Lo único que sabía es que le habían dejado allí solo con… Noemi. Tragó saliva. Siempre que había quedado a solas con ella las cosas terminaban muy mal.
Pero pareció que la antigua kunoichi no se había mostrado arrepentida tan solo por la presencia de su hermano, sino que así lo sentía de verdad. Por tercera vez, escuchó que nada se había comentado sobre el incidente. Datsue lo había creído la primera vez; lo creyó a la segunda; y, como no, también a la tercera.
—Yo… también lamento… —Demonios, cómo le costaba pedir disculpas—, lo de la revista. No debí ir tan allá. Si te sirve de consuelo —agregó, enseñando el antebrazo derecho, donde tenía una considerable zona decolorada. Una marca—, Akame casi me deja sin brazo por aquello. Me pegó un sello explosivo de clase B justo aquí y lo hizo estallar.
Joder, todavía le dolía cuando se acordaba.
—¿Y cómo pretendías que supiese que no querías darme con él? —replicó, en referencia al cocodrilo eléctrico—. Y no exageres, no eres la primera a quien le hago estallar un clon, incluso combinado con un sello explosivo, y nunca le llegué a volar los dedos a nadie, ni ninguna otra cosa.
Iba a añadir algo más, pero entonces llegó la voz de Hideo, firme pero tranquila, zanjando el tema. No solo eso, sino que achacó el problema a la supuesta baja autoestima de la kunoichi. «Uhh… Y luego soy yo quien hurga en la herida.»
Fue entonces cuando el hermano le pidió a Koko que le acompañase, desapareciendo los dos de la habitación. A dónde iban, Datsue no tenía ni la más remota idea. Lo único que sabía es que le habían dejado allí solo con… Noemi. Tragó saliva. Siempre que había quedado a solas con ella las cosas terminaban muy mal.
Pero pareció que la antigua kunoichi no se había mostrado arrepentida tan solo por la presencia de su hermano, sino que así lo sentía de verdad. Por tercera vez, escuchó que nada se había comentado sobre el incidente. Datsue lo había creído la primera vez; lo creyó a la segunda; y, como no, también a la tercera.
—Yo… también lamento… —Demonios, cómo le costaba pedir disculpas—, lo de la revista. No debí ir tan allá. Si te sirve de consuelo —agregó, enseñando el antebrazo derecho, donde tenía una considerable zona decolorada. Una marca—, Akame casi me deja sin brazo por aquello. Me pegó un sello explosivo de clase B justo aquí y lo hizo estallar.
Joder, todavía le dolía cuando se acordaba.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado