20/10/2017, 04:30
Pezones invertidos. Eso era lo que Uchiha Datsue se encontró al liberar los senos de la exkunoichi.
Aquella era literalmente la primera vez que permitía que alguien centrase su vista en ellos por más que unos segundos, primera vez que permitiría que alguien tocase y los recorriera tanto con la vista como con las manos o lo que sea que el contrario quiera hacer.
—¿Pasa algo? —preguntó algo nerviosa, esperándose una reacción de repudio.
Entre tanto, la rubia quitó su brazo del cuello del contrario y se lo llevó al seno que le habían estado estimulando, comenzó a estirar un poco la piel de la areola como si pretendiese mostrarle algo a Datsue.
—Puedes sacarlos, si quieres —le indicó, haciendo un intento por lograrlo pero para ello iba a necesitar algo más que solo una mano.
Esperaba que el shinobi no quedase horrorizado por aquello, aunque podía sentir la presión inmutable en su entrepierna, lo que le indicaba que seguía igual de excitado.
Aquella era literalmente la primera vez que permitía que alguien centrase su vista en ellos por más que unos segundos, primera vez que permitiría que alguien tocase y los recorriera tanto con la vista como con las manos o lo que sea que el contrario quiera hacer.
—¿Pasa algo? —preguntó algo nerviosa, esperándose una reacción de repudio.
Entre tanto, la rubia quitó su brazo del cuello del contrario y se lo llevó al seno que le habían estado estimulando, comenzó a estirar un poco la piel de la areola como si pretendiese mostrarle algo a Datsue.
—Puedes sacarlos, si quieres —le indicó, haciendo un intento por lograrlo pero para ello iba a necesitar algo más que solo una mano.
Esperaba que el shinobi no quedase horrorizado por aquello, aunque podía sentir la presión inmutable en su entrepierna, lo que le indicaba que seguía igual de excitado.