30/10/2017, 19:56
Datsue frunció el ceño.
—No hables de mi relación con tu hermana porque no sabes… —«…una mierda»—, lo que yo siento o dejo de sentir por ella —optó por decir, conteniéndose. No quería acabar como siempre: a palos—. Hagamos una cosa —dijo, enseñando las palmas de las manos en señal de tregua—, sigamos los consejos de tu hermano, ¿eh? Dejemos explicarnos el uno al otro antes de sacar conclusiones precipitadas.
»Primero: no estoy casado con Aiko. Aquello fue una trola, porque… Bueno, estábamos practicando sexo. —Qué mal le sonaba aquella expresión. Normalmente, hubiese dicho follar y se hubiese quedado tan pancho. Pero con las chicas siempre procuraba emplear un vocabulario menos… vulgar—. Y Ayame nos interrumpió a la mitad. Lo de que nos estábamos casando era más bien una… metáfora. Me daba cosa decir lo que estábamos haciendo realmente.
»Segundo, sobre el nombre en el pergamino de la misión… —Demonios, tenía razón, aquello no lo había pensado. Pero mejor disimular y hacer parecer que lo tenía todo planeado—, no todos los clientes piden el pergamino al presentarte. Pero en caso de hacerlo, Koko, en caso de hacerlo… —«¿En caso de hacerlo qué?» Entonces se le ocurrió una idea de súbito—. Conoces el Henge no Jutsu, ¿verdad? Yo soy capaz de aplicárselo a objetos. Podría Hengear el pergamino y transformarlo en algo idéntico, solo que con tu nombre —«Joder, ¡soy un genio!»
»Y respecto a lo tercero… Qué ganarías tú... —suspiró. Era hora de sacar toda la artillería pesada—. No se trata de ti, Koko, sino de tu hermana.
—No hables de mi relación con tu hermana porque no sabes… —«…una mierda»—, lo que yo siento o dejo de sentir por ella —optó por decir, conteniéndose. No quería acabar como siempre: a palos—. Hagamos una cosa —dijo, enseñando las palmas de las manos en señal de tregua—, sigamos los consejos de tu hermano, ¿eh? Dejemos explicarnos el uno al otro antes de sacar conclusiones precipitadas.
»Primero: no estoy casado con Aiko. Aquello fue una trola, porque… Bueno, estábamos practicando sexo. —Qué mal le sonaba aquella expresión. Normalmente, hubiese dicho follar y se hubiese quedado tan pancho. Pero con las chicas siempre procuraba emplear un vocabulario menos… vulgar—. Y Ayame nos interrumpió a la mitad. Lo de que nos estábamos casando era más bien una… metáfora. Me daba cosa decir lo que estábamos haciendo realmente.
»Segundo, sobre el nombre en el pergamino de la misión… —Demonios, tenía razón, aquello no lo había pensado. Pero mejor disimular y hacer parecer que lo tenía todo planeado—, no todos los clientes piden el pergamino al presentarte. Pero en caso de hacerlo, Koko, en caso de hacerlo… —«¿En caso de hacerlo qué?» Entonces se le ocurrió una idea de súbito—. Conoces el Henge no Jutsu, ¿verdad? Yo soy capaz de aplicárselo a objetos. Podría Hengear el pergamino y transformarlo en algo idéntico, solo que con tu nombre —«Joder, ¡soy un genio!»
»Y respecto a lo tercero… Qué ganarías tú... —suspiró. Era hora de sacar toda la artillería pesada—. No se trata de ti, Koko, sino de tu hermana.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado