2/11/2017, 19:27
Por momentos parecía que Koko estaba mimando una especie de muñeco por la poca resistencia que el Uchiha estaba ofreciendo. Fue fácil en exceso tumbarle y besarle, lo cual era preocupante porque a la mínima solía corresponder o hacer alguna otra cosa, pero no era el caso.
Esta vez en lugar de con acciones, Akame respondió con palabras que pronto la pecosa silenciaría con otro beso, uno más candente que el anterior con el que debería de poder callarle.
—Te quedas aquí —le ordenó con una sonrisa en el rostro.
Le besó una vez más y ahora sí, se levantó liberándole.
Sin más que decir o hacer, la Kageyama se dirigió a la cocina y comenzaría a cocinar, tan rápido como le fuese posible pero siempre prestando la atención necesaria para no joder de alguna manera a la preparación. Después de todo, tenía que asegurarse de que todo saliera bien.
—¡Y ni se te ocurra levantarte! —exclamó desde la cocina, obviamente dirigiéndose a Akame.
Esta vez en lugar de con acciones, Akame respondió con palabras que pronto la pecosa silenciaría con otro beso, uno más candente que el anterior con el que debería de poder callarle.
—Te quedas aquí —le ordenó con una sonrisa en el rostro.
Le besó una vez más y ahora sí, se levantó liberándole.
Sin más que decir o hacer, la Kageyama se dirigió a la cocina y comenzaría a cocinar, tan rápido como le fuese posible pero siempre prestando la atención necesaria para no joder de alguna manera a la preparación. Después de todo, tenía que asegurarse de que todo saliera bien.
—¡Y ni se te ocurra levantarte! —exclamó desde la cocina, obviamente dirigiéndose a Akame.