28/11/2017, 13:11
«Tirada de master: 2d10 por 20 Percepción, 3d10 dados por 35 Inteligencia»
«Percepción == 20, Inteligencia > 20: la dificultad de la tirada será 3 (fácil)»
«Resultado de la tirada de Percepción: 10, 4 (1 crítico, 1 éxito)»
«Resultado de la tirada de Inteligencia: 9, 4, 10 (1 crítico, 2 éxitos)»
Sí, afortunadamente, Reika leyó el mapa con eficacia y encontró enseguida el lugar que correspondía a El filo tercero. Era casi en línea recta desde la torre de la Arashikage, y las indicaciones habían sido suficientemente claras. A lo largo de su vida había pasado muchas veces por esa calle, de hecho, ahora que lo pensaba, quizás hubiera visto el establecimiento alguna que otra vez durante un paseo.
Cuando entró al local, un hombre corpulento casi la atropella al pasar a su lado cargado con dos bolsas llenas de diferentes utensilios, ninguno pensado para hacer la paz. Era un sitio oscuro, iluminado por una tenue lámpara de aceite que colgaba del techo, bastante antigua. A ambos lados del mostrador, se exhibían numerosas armas.
«Tirada de master: 2d10 por 20 de Percepción», «Dificultad 8»
«Resultado de la tirada: 6, 5 (2 fracasos)»
Reika se acercó al mostrador y se presentó. Al otro lado había un muchacho, larguirucho, un saco de huesos de cabello pelirrojo y muchas pecas. El chico tardó un poco en reaccionar. Sacudió la cabeza y tartamudeó:
—¡Oh, p-perdón! S-sí, e-espera. V-voy a a-a-avisar al je-jefe. T-t-t-te esperaba. —Desapareció por una pequeña puerta en la que no había reparado hasta el momento, metálica, al fondo del establecimiento, detrás de una cortinilla con abalorios de plástico.
Al cabo de un tiempo, otra persona bien distinta apareció por el umbral. Era un viejo enjuto de cabello largo, tan largo como su puntiaguda barba. Sus pobladas cejas apenas dejaban distinguir el color de sus ojos. Caminaba con la ayuda de un cayado de madera con decoraciones de dragones.
—¿Eres la genin que han enviado para ayudarme? Bien... bien. Entonces, ¿puedes empezar con la tarea? Humm.
«Percepción == 20, Inteligencia > 20: la dificultad de la tirada será 3 (fácil)»
«Resultado de la tirada de Percepción: 10, 4 (1 crítico, 1 éxito)»
«Resultado de la tirada de Inteligencia: 9, 4, 10 (1 crítico, 2 éxitos)»
Sí, afortunadamente, Reika leyó el mapa con eficacia y encontró enseguida el lugar que correspondía a El filo tercero. Era casi en línea recta desde la torre de la Arashikage, y las indicaciones habían sido suficientemente claras. A lo largo de su vida había pasado muchas veces por esa calle, de hecho, ahora que lo pensaba, quizás hubiera visto el establecimiento alguna que otra vez durante un paseo.
Cuando entró al local, un hombre corpulento casi la atropella al pasar a su lado cargado con dos bolsas llenas de diferentes utensilios, ninguno pensado para hacer la paz. Era un sitio oscuro, iluminado por una tenue lámpara de aceite que colgaba del techo, bastante antigua. A ambos lados del mostrador, se exhibían numerosas armas.
«Tirada de master: 2d10 por 20 de Percepción», «Dificultad 8»
«Resultado de la tirada: 6, 5 (2 fracasos)»
Reika se acercó al mostrador y se presentó. Al otro lado había un muchacho, larguirucho, un saco de huesos de cabello pelirrojo y muchas pecas. El chico tardó un poco en reaccionar. Sacudió la cabeza y tartamudeó:
—¡Oh, p-perdón! S-sí, e-espera. V-voy a a-a-avisar al je-jefe. T-t-t-te esperaba. —Desapareció por una pequeña puerta en la que no había reparado hasta el momento, metálica, al fondo del establecimiento, detrás de una cortinilla con abalorios de plástico.
Al cabo de un tiempo, otra persona bien distinta apareció por el umbral. Era un viejo enjuto de cabello largo, tan largo como su puntiaguda barba. Sus pobladas cejas apenas dejaban distinguir el color de sus ojos. Caminaba con la ayuda de un cayado de madera con decoraciones de dragones.
—¿Eres la genin que han enviado para ayudarme? Bien... bien. Entonces, ¿puedes empezar con la tarea? Humm.