11/12/2017, 01:23
Le podía pasar a cualquiera. Eso fue lo que dijo. Rika hizo un pequeño análisis del joven. Tenía cierto parecido a Nemu de espaldas, pero de frente, no era nada parecido. Sería porque no estaba acostumbrada a ver a chicos con el cabello blanco por lo que aquello le indujo a la confusión. Sonrió. Mostró una cara bonita, pues aquello había sido una pequeña y cómica situación.
- Pensé que eras un amigo mío. – Volvió a excusarse, aunque ya no hacía falta que lo hiciera. No era ya momento. – Yo no conozco nada parecido a este edificio. Como no he salido nunca del páis del bosque, no conozco más allá de los límites. – Confesó. Puede que ella no hubiera salido de allí por lo que no había visto nada igual en persona, pero en los libros si había visto algo más bello y bonito. Pero aquello, no contaba como tal para ella.
Dio un par de pasos más firmes hacia adelante. Y cuando el joven dijo su nombre, ella no pudo evitar soltar una pequeña risa.
- Yo soy Rika. – Saludó. – Pero no de rica, no tengo dinero. Y supongo que tú tampoco eres rico, ¿verdad? – Preguntó. A ver si acababa de hacer una broma y aquel chico tenía el suficiente status social y el capital necesario como para serlo y le había ofendido sin querer llegar a hacerlo.
Estrechó su mano, como símbolo de buenos modales y esta vez sí que dijo su nombre completo, con un tono más serio.
- Sarutobi Rika – Ese era su nombre completo, y orgullosa de él estaba. No se cansaba de repetirlo, incluso si le habían preguntado hace cinco minutos por su apellido, ella lo repetiría sin problema alguno.
El nombre de Senju le sonaba de algo. ¿Puede ser que lo hubiera visto en algún libro, o estudiado en clase? No lo recordaba en ese preciso instante, así que pensó que no sería para nada importante. Levantó su otro brazo y enseño la bolsa que portaba, aunque el joven no pudiera ver su interior.
- ¿Has venido también de compras? – Preguntó.
- Pensé que eras un amigo mío. – Volvió a excusarse, aunque ya no hacía falta que lo hiciera. No era ya momento. – Yo no conozco nada parecido a este edificio. Como no he salido nunca del páis del bosque, no conozco más allá de los límites. – Confesó. Puede que ella no hubiera salido de allí por lo que no había visto nada igual en persona, pero en los libros si había visto algo más bello y bonito. Pero aquello, no contaba como tal para ella.
Dio un par de pasos más firmes hacia adelante. Y cuando el joven dijo su nombre, ella no pudo evitar soltar una pequeña risa.
- Yo soy Rika. – Saludó. – Pero no de rica, no tengo dinero. Y supongo que tú tampoco eres rico, ¿verdad? – Preguntó. A ver si acababa de hacer una broma y aquel chico tenía el suficiente status social y el capital necesario como para serlo y le había ofendido sin querer llegar a hacerlo.
Estrechó su mano, como símbolo de buenos modales y esta vez sí que dijo su nombre completo, con un tono más serio.
- Sarutobi Rika – Ese era su nombre completo, y orgullosa de él estaba. No se cansaba de repetirlo, incluso si le habían preguntado hace cinco minutos por su apellido, ella lo repetiría sin problema alguno.
El nombre de Senju le sonaba de algo. ¿Puede ser que lo hubiera visto en algún libro, o estudiado en clase? No lo recordaba en ese preciso instante, así que pensó que no sería para nada importante. Levantó su otro brazo y enseño la bolsa que portaba, aunque el joven no pudiera ver su interior.
- ¿Has venido también de compras? – Preguntó.