4/01/2018, 20:32
Por suerte para ella, el asunto terminó allí mismo. El desconocido dejó de insistirle y ella pudo encerrarse en su habitación, de donde no saldría, al menos no pronto.
«Eso fue raro »se dijo a sí misma, justo antes de tumbarse sobre la cama.
Seguramente no volvería a salir por lo que resta del día, a no ser que alguno de sus superiores en la garita le ordenase lo contrario. Así que, si aquello no ocurría, no habría chances de toparse nuevamente con ese chico de Amegakure.
«Eso fue raro »se dijo a sí misma, justo antes de tumbarse sobre la cama.
Seguramente no volvería a salir por lo que resta del día, a no ser que alguno de sus superiores en la garita le ordenase lo contrario. Así que, si aquello no ocurría, no habría chances de toparse nuevamente con ese chico de Amegakure.