10/01/2018, 04:52
Lejos de responder a la petición de la Kageyama, Zaide indagó en la distinta coloración en los ojos de la joven quien lejos de mostrar sorpresa, se mantuvo firme —tanto como su situación actual se lo permitía— en cuanto a lo que había pedido, seguía siendo un matojo de nervios y se le notaba a leguas que le hacía buena falta descansar un par de horas.
Ante la oferta del vino simplemente la rechazó con un gesto de su cabeza.
—¿Entonces? ¿Cuál es tu plan? A no ser que estés dispuesto a hacer algo tan temerario —Insistió, quería saber por qué insistía en contarle sobre sus planes en lugar de tomar por la fuerza lo que le apetecía.
Aunque hasta cierto punto tenía sentido, Yume sabía cuán numeroso era el clan Sakamoto, aunque no podía saberse a ciencia cierta si la exiliada sabía del rango de la mayoría de los shinobis y demás. En otras palabras, Koko no tenía manera de saber hasta qué punto ese Uchiha estaría dispuesto a plantarle cara al clan que la había exiliado a ella.
Ante la oferta del vino simplemente la rechazó con un gesto de su cabeza.
—¿Entonces? ¿Cuál es tu plan? A no ser que estés dispuesto a hacer algo tan temerario —Insistió, quería saber por qué insistía en contarle sobre sus planes en lugar de tomar por la fuerza lo que le apetecía.
Aunque hasta cierto punto tenía sentido, Yume sabía cuán numeroso era el clan Sakamoto, aunque no podía saberse a ciencia cierta si la exiliada sabía del rango de la mayoría de los shinobis y demás. En otras palabras, Koko no tenía manera de saber hasta qué punto ese Uchiha estaría dispuesto a plantarle cara al clan que la había exiliado a ella.