10/01/2018, 19:55
El ninja se dio la vuelta, y terminó de tragar el bocado antes de dedicarle a Reika una amplia sonrisa. Escuchó atentamente su solicitud, a la que respondió:
—No sé de qué Kame me estás hablando —dijo el hombre—. Pero si buscas El Yunque Enamorado, lo tienes al fondo de esa misma calle. —Señaló al este, donde una gran avenida discurría cuesta abajo.
—No sé de qué Kame me estás hablando —dijo el hombre—. Pero si buscas El Yunque Enamorado, lo tienes al fondo de esa misma calle. —Señaló al este, donde una gran avenida discurría cuesta abajo.