23/01/2018, 23:26
Tristemente el intento de la kunoichi por expresarse pareció no haber dado el resultado que se esperaba y allí estaba ella, detrás de la mesada buscando entre cajas de té en busca del solicitado. No tardó demasiado y ya que estaba, aprovechó a acercarse a otro compartimiento para sacar de allí una taza de cerámica. Ella no bebería nada así que con esa sola bastaba y sobraba.
—¿Azúcar o crema? —preguntó una vez que se puso de pie.
Puso el saco del té dentro de la taza y mientras esperaba una respuesta, se acercó a un pequeño armario del que terminó por sacar un paquete de galletas de sabor a vainilla. No era partidaria de comer chocolate así que ese comestible no tenía los habituales trocitos incrustados.
Igual las terminaría por echar sobre un plato y lo dejaría sobre la mesa, al alcance del Uchiha.
—¿Azúcar o crema? —preguntó una vez que se puso de pie.
Puso el saco del té dentro de la taza y mientras esperaba una respuesta, se acercó a un pequeño armario del que terminó por sacar un paquete de galletas de sabor a vainilla. No era partidaria de comer chocolate así que ese comestible no tenía los habituales trocitos incrustados.
Igual las terminaría por echar sobre un plato y lo dejaría sobre la mesa, al alcance del Uchiha.