6/02/2018, 23:57
—¿Realmente quiero encontrar un tesoro?...
Esa es una pregunta que yo no podía responder, por desgracia. Claro, que, si pudiera estar en su mente para contestarle, también podría estarlo para sacarle muchísima información. Aquel era un don con el que me hubiera gustado nacer. Por muy inteligente que uno fuera, las personas siempre era un misterio, cada una actuaba de una manera diferente, impulsado por diferentes motivos, y nunca acababas de comprenderlos en general. Solo por eso me hubiera gustado estar en la cabeza de todos. Era el ansia de saber, de conocer.
—La verdad creo que lo más me gustaría toparme con algún tesoro o el lugar donde se encontraba uno para comprobar realmente que las historias sobre este lugar son ciertas y aun así el mayor tesoro seria un libro sobre la historia de este lugar. Más concretamente sobre quienes eran los habitante de este lugar, pero claro la probabilidad de encontrar algo así básicamente es nula... Ese seria el resumen de mi "tesoro" deseado
—Cámaras del tesoro seguro que hay, lo que pasa es que estará todo desgastado y en mal estado, y seguramente estén no solo vacías, sino que inaccesibles, por muchos acertijos que resuelvas. Y si aquí hubiera libros, estarían estropeados por la humedad y el moho.
Y yo tendría que matar al idiota que hubiera decidido que ese era buen sitio para esconder un libro. Los libros son algo sagrado, el conocimiento es sagrado. Y, además, el conocidito es el arma más accesible y más letal que existía en el mundo. Seria una desgracia que alguien hubiera abandonado allí un libro.
—La primera pregunta que se me viene a la mente sobre los antiguos habitantes de este lugar es ¿por que tantos templos?... a todo esto ¿que opinas de este lugar?
—Tal vez este era un lugar de oración a los dioses antiguos, y tenían construido un templo para cada deidad. Opino que solo son las ruinas de una civilización antigua, desgastadas por orden del tiempo.
Esa es una pregunta que yo no podía responder, por desgracia. Claro, que, si pudiera estar en su mente para contestarle, también podría estarlo para sacarle muchísima información. Aquel era un don con el que me hubiera gustado nacer. Por muy inteligente que uno fuera, las personas siempre era un misterio, cada una actuaba de una manera diferente, impulsado por diferentes motivos, y nunca acababas de comprenderlos en general. Solo por eso me hubiera gustado estar en la cabeza de todos. Era el ansia de saber, de conocer.
—La verdad creo que lo más me gustaría toparme con algún tesoro o el lugar donde se encontraba uno para comprobar realmente que las historias sobre este lugar son ciertas y aun así el mayor tesoro seria un libro sobre la historia de este lugar. Más concretamente sobre quienes eran los habitante de este lugar, pero claro la probabilidad de encontrar algo así básicamente es nula... Ese seria el resumen de mi "tesoro" deseado
—Cámaras del tesoro seguro que hay, lo que pasa es que estará todo desgastado y en mal estado, y seguramente estén no solo vacías, sino que inaccesibles, por muchos acertijos que resuelvas. Y si aquí hubiera libros, estarían estropeados por la humedad y el moho.
Y yo tendría que matar al idiota que hubiera decidido que ese era buen sitio para esconder un libro. Los libros son algo sagrado, el conocimiento es sagrado. Y, además, el conocidito es el arma más accesible y más letal que existía en el mundo. Seria una desgracia que alguien hubiera abandonado allí un libro.
—La primera pregunta que se me viene a la mente sobre los antiguos habitantes de este lugar es ¿por que tantos templos?... a todo esto ¿que opinas de este lugar?
—Tal vez este era un lugar de oración a los dioses antiguos, y tenían construido un templo para cada deidad. Opino que solo son las ruinas de una civilización antigua, desgastadas por orden del tiempo.