16/03/2018, 09:44
El anciano estiró su mano para poder tomar la espada con la poca fuerza que le quedaba en el. La levantó orgulloso y con esas últimas fuerzas dedicó palabras a ambos jóvenes allí presentes: A la kunoichi dar las gracias y dar por cumplido el encargo, para el muchacho, entregaría finalmente todo lo suyo, todo...Antes de fallecer.
Las máquinas indicaron que el corazón del hombre había dado su último latido. La rubia se sentía fatal y trató por todos los medios posibles de no llorar. Yomatsu, en cambio, no lo logró dando lugar a una emotiva escena.
El trabajo ya estaba finalizado al fin y la kunoichi ya estaba de acuerdo con retirarse de allí cuando Yomatsu le agradeció y pidió que se retire -Con su permiso Yomatsu-san- dijo la rubia despidiéndose del nuevo herrero del filo certero.
Las máquinas indicaron que el corazón del hombre había dado su último latido. La rubia se sentía fatal y trató por todos los medios posibles de no llorar. Yomatsu, en cambio, no lo logró dando lugar a una emotiva escena.
El trabajo ya estaba finalizado al fin y la kunoichi ya estaba de acuerdo con retirarse de allí cuando Yomatsu le agradeció y pidió que se retire -Con su permiso Yomatsu-san- dijo la rubia despidiéndose del nuevo herrero del filo certero.
Hablo - Pienso - Telepatía