4/04/2018, 21:28
El pelinegro accedió a mi petición y en un par de segundos se encontraba a mi disposición. —Es simple, solo es que me ayudes a vendar la herida.— Comenté mientras yo me encargaba de limpiar las mismas con la gasa que había sacado previamente. —Es un poco difícil hacerlo con una mano.— Concluí y luego le facilité el rollo de vendas. —Aquí hay adhesivo.— Señalé para que cuando terminara con el vendaje lo asegurase.
—No me ofendes, y sí esa es tu decisión está bien.— Concluí. —Usaré mis habilidades cuando sea necesario entonces.— Aseguré, dando a entender que mi propuesta había quedado totalmente denegada. —Sé de lo que va nuestra labor, pero... En lo personal no he hecho nada para que tengas que desconfiar de mi, ¿o sí?— Lancé la pregunta al aire.
"Él es bastante diferente a Koutetsu... ¿Qué será de su vida?"
—¿Por casualidad conoces a un shinobi llamado Koutetsu?— Ya que tenía la oportunidad, preguntaría por él.
—No me ofendes, y sí esa es tu decisión está bien.— Concluí. —Usaré mis habilidades cuando sea necesario entonces.— Aseguré, dando a entender que mi propuesta había quedado totalmente denegada. —Sé de lo que va nuestra labor, pero... En lo personal no he hecho nada para que tengas que desconfiar de mi, ¿o sí?— Lancé la pregunta al aire.
"Él es bastante diferente a Koutetsu... ¿Qué será de su vida?"
—¿Por casualidad conoces a un shinobi llamado Koutetsu?— Ya que tenía la oportunidad, preguntaría por él.