29/08/2015, 20:42
Eri empezó a jugar con sus dedos mientras escuchaba como Toyo volvía a hablar, catalogando su propósito y sus ambiciones como una muestra loable, se sonrojó al sentir como no había dicho mucho de ella misma, más sin embargo dijo todo lo que quería decir. Entonces escuchó la explicación de Yota, a él no le quedaban muchas más opciones, se había criado con una familia de ninjas al parecer, además de que quería encontrar a alguien, pero por la conversación que había mantenido con el pelirrojo mayor, no era un tipo de venganza, si no... ¿Un encuentro para hablar?
''¿Quién será esa persona? ¿De verdad no es una venganza? Últimamente está mucho de moda eso de vengarse...''
Entonces Toyo, una vez finalizado el rubio platinado su discurso, volvió a hablar, alegando que si teníamos que hacer preguntas tanto a él como al compañero, que ese era el momento, y como condición a la persona a la que se cuestiona, ésta debe contestar con total sinceridad. Entonces Yota decidió abrir el pequeño cuestionario con una pregunta hacia la joven kunoichi allí sentada.
-¿Que por qué me muerdo el labio? Oh... Vaya, es... Como un tic nervioso.-Contestó la pequeña, después de dar vueltas en su cabeza para encontrar la palabra adecuada.-Suelo hacerlo cuando estoy triste, o nerviosa, y a veces puede pasar factura, haciendo a veces pequeñas heridas... - A medida que fuer hablando, su voz se fue apagando lentamente hasta terminar en un susurro. Le daba bastante vergüenza hablar de sus gestos que acostumbraba a repetir inconscientemente.
Una vez contestada la pregunta de Yota, ella entró en el juego de nuevo, haciendo esta vez dos preguntas, una para cada persona que estaba en el aula sin contarse ella misma.
-Toyo-senpai, ¿por qué no se presenta usted y nos cuenta sus propósitos y ambiciones?- Preguntó al mayor de los tres, con una sonrisa, para luego girarse y mirar a su compañero de equipo. -Yota, ¿por qué siempre tienes caramelos?-
''¿Quién será esa persona? ¿De verdad no es una venganza? Últimamente está mucho de moda eso de vengarse...''
Entonces Toyo, una vez finalizado el rubio platinado su discurso, volvió a hablar, alegando que si teníamos que hacer preguntas tanto a él como al compañero, que ese era el momento, y como condición a la persona a la que se cuestiona, ésta debe contestar con total sinceridad. Entonces Yota decidió abrir el pequeño cuestionario con una pregunta hacia la joven kunoichi allí sentada.
-¿Que por qué me muerdo el labio? Oh... Vaya, es... Como un tic nervioso.-Contestó la pequeña, después de dar vueltas en su cabeza para encontrar la palabra adecuada.-Suelo hacerlo cuando estoy triste, o nerviosa, y a veces puede pasar factura, haciendo a veces pequeñas heridas... - A medida que fuer hablando, su voz se fue apagando lentamente hasta terminar en un susurro. Le daba bastante vergüenza hablar de sus gestos que acostumbraba a repetir inconscientemente.
Una vez contestada la pregunta de Yota, ella entró en el juego de nuevo, haciendo esta vez dos preguntas, una para cada persona que estaba en el aula sin contarse ella misma.
-Toyo-senpai, ¿por qué no se presenta usted y nos cuenta sus propósitos y ambiciones?- Preguntó al mayor de los tres, con una sonrisa, para luego girarse y mirar a su compañero de equipo. -Yota, ¿por qué siempre tienes caramelos?-
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)