17/05/2018, 14:52
Yui mantuvo unos instantes la mirada sobre Mogura, y finalmente, con una señal con la mano, le hizo pasar al despacho y le dio permiso para que tomase asiento.
—Claro, claro, Mogura-kun —dijo, juguetona—. ¿Qué será esta vez? ¿Otro genin rebelde? ¿Quizás has allanado otro edificio oficial?
»Si has tenido otro problema con un ninja, espero que no vengas con su cadáver —bromeó Yui.
Ay.
—Claro, claro, Mogura-kun —dijo, juguetona—. ¿Qué será esta vez? ¿Otro genin rebelde? ¿Quizás has allanado otro edificio oficial?
»Si has tenido otro problema con un ninja, espero que no vengas con su cadáver —bromeó Yui.
Ay.