15/06/2018, 09:19
Juro utilizó todas sus fuerzas en aquella palmada, buscando detener a la bestia. Durante unos segundos, pareció que funcionaba. Que podría arrojarla con todas sus fuerzas y tumbarla.
Sin embargo, la realidad era cruel, y el monstruo mucho más fuerte que su chakra.
Jin volvió en sí, justo a tiempo para empujar a Juro y apartarse. La panda cayó al suelo, justo en ese momento, con ambas personas a su lado. Juro ni si quiera pudo plantearse si había sido una buena idea o no. La buena noticia era que Jin estaba a salvo, la mala, que la panda podía seguir peleando. Juro comprobó que estaba llena de heridas y sangrante, pero parecía seguir capaz de continuar. Era un verdadero monstruo.
« Mierda... »
Jadeó, desde el suelo. Había utilizado dos técnicas bastante poderosas sin demasiado tiempo para descansar. Sentía como estaba empezando a rozar el límite de su chakra y de sus fuerzas.
« No puede ser. Voy a caer contra... ¿esa cosa? » — pensó en su hermana y en su abuela. ¿Qué les dirían? ¿Que había muerto en una misión enfrentandose a un panda? ¿Qué al menos le había salvado la vida al cazador? Eso si el panda luego no lo mataba a él, que sería lo más probable.
Apretó los puños. No podía permitirse algo así. Con las fuerzas que le quedaban...
La criatura se adelantó por él, y le atacó. Con su pata, le aplastró la pierna izquierda. Juro gritó de puro dolor, comprobando con horror que no la sentía. ¿La habría roto?
Movido por la adrenalina y el miedo, casi ni sintió dolor. Tampoco sintió cansancio o extenuación. Los nervios le apretaban el estómago y una vocecilla en su interior se lo dejaba bien claro: "atacale, atacale con todas tus fuerzas. Puede que no tengas oportunidad de hacer otro ataque después"
La panda alzó sus extremidades para darle un segundo golpe, y Juro alzó el brazo.
— ¡Muerete de una puta vez! — Realizó un movimiento de arco descendente, con el dedo índice y corazón, cargados de chakra. De sus fuerzas.
Empleando todo el poder que tuvo disponible, invocó un viento tan concentrado, capaz de cortar como una katana. Y lo lanzó en dirección hacia el oso, apuntando precisamente hacia su garganta. A tal distancia, no pensaba fallar en el siguiente golpe: lo haría mortal.
« Por favor. Funciona » — Se dio cuenta de que aún seguía gritando. Desde después de lanzar la técnica. Quizá gritaba de dolor o de frustración, o de miedo.
Sin embargo, la realidad era cruel, y el monstruo mucho más fuerte que su chakra.
Jin volvió en sí, justo a tiempo para empujar a Juro y apartarse. La panda cayó al suelo, justo en ese momento, con ambas personas a su lado. Juro ni si quiera pudo plantearse si había sido una buena idea o no. La buena noticia era que Jin estaba a salvo, la mala, que la panda podía seguir peleando. Juro comprobó que estaba llena de heridas y sangrante, pero parecía seguir capaz de continuar. Era un verdadero monstruo.
« Mierda... »
Jadeó, desde el suelo. Había utilizado dos técnicas bastante poderosas sin demasiado tiempo para descansar. Sentía como estaba empezando a rozar el límite de su chakra y de sus fuerzas.
« No puede ser. Voy a caer contra... ¿esa cosa? » — pensó en su hermana y en su abuela. ¿Qué les dirían? ¿Que había muerto en una misión enfrentandose a un panda? ¿Qué al menos le había salvado la vida al cazador? Eso si el panda luego no lo mataba a él, que sería lo más probable.
Apretó los puños. No podía permitirse algo así. Con las fuerzas que le quedaban...
La criatura se adelantó por él, y le atacó. Con su pata, le aplastró la pierna izquierda. Juro gritó de puro dolor, comprobando con horror que no la sentía. ¿La habría roto?
Movido por la adrenalina y el miedo, casi ni sintió dolor. Tampoco sintió cansancio o extenuación. Los nervios le apretaban el estómago y una vocecilla en su interior se lo dejaba bien claro: "atacale, atacale con todas tus fuerzas. Puede que no tengas oportunidad de hacer otro ataque después"
La panda alzó sus extremidades para darle un segundo golpe, y Juro alzó el brazo.
— ¡Muerete de una puta vez! — Realizó un movimiento de arco descendente, con el dedo índice y corazón, cargados de chakra. De sus fuerzas.
Empleando todo el poder que tuvo disponible, invocó un viento tan concentrado, capaz de cortar como una katana. Y lo lanzó en dirección hacia el oso, apuntando precisamente hacia su garganta. A tal distancia, no pensaba fallar en el siguiente golpe: lo haría mortal.
« Por favor. Funciona » — Se dio cuenta de que aún seguía gritando. Desde después de lanzar la técnica. Quizá gritaba de dolor o de frustración, o de miedo.
Hablo / Pienso
Avatar hecho por la increible Eri-sama.
...
Sellos implantados: Hermandad intrepida
- Juro y Datsue : Aliento nevado, 218. Poder:60