22/06/2018, 13:53
(Última modificación: 22/06/2018, 13:53 por Uchiha Akame.)
Akame esbozó una mueca un tanto infantil ante la respuesta de su alumna, que se le hacía tan condescendiente como inteligente. «Menuda es, se nota que ha trabajado de cara al público», pensó el jōnin. Luego Karma procedió a explicarle el motivo de que le hubiese citado allí, tan lejos de la Aldea, y de forma tan repentina.
Cuando la kunoichi terminó de hablar, al Uchiha se le arrugó el rostro.
—¡Karma-san! Vigila sobre qué temas hablas fuera de la Aldea —la reprendió, bajando él mismo el tono. Todavía se acordaba de cuando una descuidada conversación con Datsue, a bordo de un barco, les había puesto a ambos en el punto de mira del difunto Zoku—. No puedes ir por ahí soltando información como esa tan alegremente, coño.
El jōnin se cruzó de brazos y emitió un suspiro de resignación. Luego tomó su taza de té y le dio un buen trago, saboreando el brebaje que le refrescaba la garganta. Carraspeó.
—¿Y me has hecho venir hasta aquí sólo para eso, buena mujer? ¡Por Amaterasu! —se quejó—. ¿No podrías haberme escrito una carta?
Cuando la kunoichi terminó de hablar, al Uchiha se le arrugó el rostro.
—¡Karma-san! Vigila sobre qué temas hablas fuera de la Aldea —la reprendió, bajando él mismo el tono. Todavía se acordaba de cuando una descuidada conversación con Datsue, a bordo de un barco, les había puesto a ambos en el punto de mira del difunto Zoku—. No puedes ir por ahí soltando información como esa tan alegremente, coño.
El jōnin se cruzó de brazos y emitió un suspiro de resignación. Luego tomó su taza de té y le dio un buen trago, saboreando el brebaje que le refrescaba la garganta. Carraspeó.
—¿Y me has hecho venir hasta aquí sólo para eso, buena mujer? ¡Por Amaterasu! —se quejó—. ¿No podrías haberme escrito una carta?