10/07/2018, 01:08
Y Kaido eligió. Vaya que si eligió. De forma inconsciente o no. De forma pensada y meditada o no. Pero eligió, y lo hizo de la forma más contundente que se podía hacer. Eligió matar. Eligió apagar aquella triste llama con la fuerza del mar.
El cadáver se vio sepultado por el agua, que arrasó con el comedor y extinguió las llamas. El cadáver, muerto. Esta vez de verdad. Pero, lo que Kaido no sabía, y no sabría hasta dentro de mucho tiempo…
… es que en realidad no había apagado las llamas, sino que las había avivado como solo un hombre se había atrevido a hacer. Ese hombre se llamaba Uchiha Zaide. Y ese hombre estaba muerto.
El cadáver se vio sepultado por el agua, que arrasó con el comedor y extinguió las llamas. El cadáver, muerto. Esta vez de verdad. Pero, lo que Kaido no sabía, y no sabría hasta dentro de mucho tiempo…
… es que en realidad no había apagado las llamas, sino que las había avivado como solo un hombre se había atrevido a hacer. Ese hombre se llamaba Uchiha Zaide. Y ese hombre estaba muerto.