10/07/2018, 22:53
Quizás se estaba volviendo loca —un augurio de que la muerte helada acechaba—, pero Karma juró advertir un murmullo a lo lejos, algo distinto al sonido de la nieve crujiendo.
Este fue creciendo. Eventualmente quedó claro que no era imaginación suya: algo o alguien estaba haciendo ruido. En primera instancia alzó la guardia y bajó el ritmo, caminando con mayor precaución y sigilo. Pero el rumor acabó tomando forma...
—... sobre el frio y el calor, sobre el hambre y la fatiga, a los chuunin con honor.
«¿Están... cantando?», pensó con incredulidad. Sea como fuere, era razonable pensar que había otro ser humano cerca. ¡A la porra con tener cuidado! ¡Necesitaba ayuda o terminaría convertida en un carámbano!
—¡¿Hola?! —gritó, esperando que se le escuchase.
También echó a correr en dirección a la voz. Casi tropezó en un par de ocasiones, en absoluto habituada a correr entre tanta nieve. Por ello tambaleó, pero no dejó de trotar.
Este fue creciendo. Eventualmente quedó claro que no era imaginación suya: algo o alguien estaba haciendo ruido. En primera instancia alzó la guardia y bajó el ritmo, caminando con mayor precaución y sigilo. Pero el rumor acabó tomando forma...
—... sobre el frio y el calor, sobre el hambre y la fatiga, a los chuunin con honor.
«¿Están... cantando?», pensó con incredulidad. Sea como fuere, era razonable pensar que había otro ser humano cerca. ¡A la porra con tener cuidado! ¡Necesitaba ayuda o terminaría convertida en un carámbano!
—¡¿Hola?! —gritó, esperando que se le escuchase.
También echó a correr en dirección a la voz. Casi tropezó en un par de ocasiones, en absoluto habituada a correr entre tanta nieve. Por ello tambaleó, pero no dejó de trotar.