Cuando el bijuu se dio la vuelta, observaría sólo una figura, pues la otra acababa de meterse bajo tierra y quedado totalmente fuera de su alcance. Los ojos de la bestia se cruzaron con los de Blame, y el muchacho sintió.
Sintió la ira, el odio y el miedo, un miedo terrible. Una amalgama de sentimientos que le cruzó de parte a parte y lo dejó un segundo sin respiración.
Yoshimitsu llegó a las afueras de la aldea, pero frente a él sólo caía un precipicio enorme hacia el mar. Todo a su alrededor estaba en llamas, incluso sabiendo que el bijuu no había pasado todavía por allí. Quizás sus ataques habían alcanzado la distancia.
Había mucha gente. Pero todos muertos. Algunos se habían intentado lanzar al mar, pero ya estaban heridos cuando llegaron al borde del barranco, a juzgar por el rastro de sangre que recorría desde unos charcos hacia allá.
Lo curioso: sus heridas eran de arma blanca. Cortes limpios. No había sido el bijuu. Quien fuese que pudiera haberlos matado a ellos, todavía andaba por allí, a juzgar por el color de la sangre fresca y el olor a hierro.
Todavía quedaba una salida, pero, ¿estaría tan loco para tirarse por el precipicio? Quizás pudiera utilizar sus habilidades como ninja para...
Sintió la ira, el odio y el miedo, un miedo terrible. Una amalgama de sentimientos que le cruzó de parte a parte y lo dejó un segundo sin respiración.
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Yoshimitsu llegó a las afueras de la aldea, pero frente a él sólo caía un precipicio enorme hacia el mar. Todo a su alrededor estaba en llamas, incluso sabiendo que el bijuu no había pasado todavía por allí. Quizás sus ataques habían alcanzado la distancia.
Había mucha gente. Pero todos muertos. Algunos se habían intentado lanzar al mar, pero ya estaban heridos cuando llegaron al borde del barranco, a juzgar por el rastro de sangre que recorría desde unos charcos hacia allá.
Lo curioso: sus heridas eran de arma blanca. Cortes limpios. No había sido el bijuu. Quien fuese que pudiera haberlos matado a ellos, todavía andaba por allí, a juzgar por el color de la sangre fresca y el olor a hierro.
Todavía quedaba una salida, pero, ¿estaría tan loco para tirarse por el precipicio? Quizás pudiera utilizar sus habilidades como ninja para...
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