30/01/2019, 19:14
Los ninjas de Kusa escucharon atentamente las palabras del alguacil. Umichi remarcaba una huida sospechosa por parte de la banda que cruzaba el río, la información se la había pasado una vecina y pues visto esto, había que tomarlo con pinzas por las diferencias entre los dos pueblos. Pero siendo él el alguacil tendría buen olfato con los maleantes y con las informaciones falsas o de este calibre. Geki se había quedado pensativo, mirando un punto fijo en la pared nadando en su mente, hasta que la voz de Daigo lo volvió en sí, sacudió un poco la cabeza en un movimiento rápido para despertar del trance.
"—Entiendo. Muchas gracias por todo, Umichi-san. Haremos todo lo que esté en nuestra mano para llegar al fondo de esto."
Claro que si lo harían, pero ¿Qué iban a hacer si se cruzaban con esos tipos? El Senju temió un poco por su seguridad, pero enseguida recordó la compañía de Daigo. ÉL era un genin experimentado y por algo le había asignado esa misión, de a poco recobró la confianza.
—Muchas gracias Umichi-san — hizo una pequeña reverencia y se volvió a su compañero —Te sigo Daigo-kun.
Y esperó efectivamente que Daigo comenzara a caminar para acompañarlo en el trayecto.
"—Entiendo. Muchas gracias por todo, Umichi-san. Haremos todo lo que esté en nuestra mano para llegar al fondo de esto."
Claro que si lo harían, pero ¿Qué iban a hacer si se cruzaban con esos tipos? El Senju temió un poco por su seguridad, pero enseguida recordó la compañía de Daigo. ÉL era un genin experimentado y por algo le había asignado esa misión, de a poco recobró la confianza.
—Muchas gracias Umichi-san — hizo una pequeña reverencia y se volvió a su compañero —Te sigo Daigo-kun.
Y esperó efectivamente que Daigo comenzara a caminar para acompañarlo en el trayecto.