6/02/2019, 20:29
Pero lejos de ser así de poderosa, la kunoichi mostró debilidades. Así lo indicaba su mirada, pesada y, como decirlo, parecía sentirse culpable por algo.
—No, que va. Mucho me temo que soy una completa negada para las técnicas de sellado... Ni siquiera los expertos de Amegakure fueron capaces de encontrarle una solución
— Oh... — balbucee con cierta sorpresa.
Acto seguido, devolví el kunai al interior del mecanismo.
Supongo que te enterarías de que hace poco nuestros Kage se reunieron en el Valle de los Dojos para pactar una nueva Alianza y unirse contra la amenaza de los Generales. Bueno, Yui-sama se vio obligada a pedir ayuda a los sabios Uzumaki de Uzushiogakure. Es gracias a ellos que ahora estoy aquí.
«Así que a Kenzou-sama le ha ido como a anillo al dedo el asunto...»
— Te envidio, Ayame-san — le dije con total sinceridad y una sonrisa conciliadora — Quiero decir, dudo muchísimo que Amegakure quisiese aliarse con Uzushiogakure després de lo sucedido en aquel estadio el año pasado. No obstante... Accedieron para devolverte a la normalidad. Ya me gustaría a mí ser tan querido
Me acerqué un poco más, apenas un par de metros nos separaban, puede que algo menos e hice una reverencia poniendo mi rodilla diestra en la hierba.
— Ruego disculpes mi comportamiento de antes. Según parece toda precaución es poca en los tiempos que corren y bueno, no tenía conocimiento de lo que hicieron los Uzumaki por ti
Alcé la cabeza y de nuevo, miré al acompañante de Ayame.
— Discúlpame tu también, Kori-san. Lamento habernos tenido que conocer de este modo
—No, que va. Mucho me temo que soy una completa negada para las técnicas de sellado... Ni siquiera los expertos de Amegakure fueron capaces de encontrarle una solución
— Oh... — balbucee con cierta sorpresa.
Acto seguido, devolví el kunai al interior del mecanismo.
Supongo que te enterarías de que hace poco nuestros Kage se reunieron en el Valle de los Dojos para pactar una nueva Alianza y unirse contra la amenaza de los Generales. Bueno, Yui-sama se vio obligada a pedir ayuda a los sabios Uzumaki de Uzushiogakure. Es gracias a ellos que ahora estoy aquí.
«Así que a Kenzou-sama le ha ido como a anillo al dedo el asunto...»
— Te envidio, Ayame-san — le dije con total sinceridad y una sonrisa conciliadora — Quiero decir, dudo muchísimo que Amegakure quisiese aliarse con Uzushiogakure després de lo sucedido en aquel estadio el año pasado. No obstante... Accedieron para devolverte a la normalidad. Ya me gustaría a mí ser tan querido
Me acerqué un poco más, apenas un par de metros nos separaban, puede que algo menos e hice una reverencia poniendo mi rodilla diestra en la hierba.
— Ruego disculpes mi comportamiento de antes. Según parece toda precaución es poca en los tiempos que corren y bueno, no tenía conocimiento de lo que hicieron los Uzumaki por ti
Alcé la cabeza y de nuevo, miré al acompañante de Ayame.
— Discúlpame tu también, Kori-san. Lamento habernos tenido que conocer de este modo
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa