5/04/2019, 22:24
El rubio cada vez le agradaba más. Y sin embargo, creía que un último empujón era necesario. Si no toleraba que un superior le acusase sin pruebas, menos un imbécil que no conocía ni la mitad de cosas que cargaba en sus memorias. Pues si bien era un genin, tenía muchas más anécdotas que contar de lo que podría esperarse.
—Eres tú el que ha estado faltando el respeto desde un inicio. Has juzgado mi cantar desde tu ignorancia y tú retrógada manera de pensar. ¿Acaso vos si sabes lo que es llevar cicatrices de batalla? ¿Acaso vos eres capaz de hacer resonar a las mil aves? Has asumido que yo no lo sé, ¿vos sí? Pero sobre todo, has asumido que yo no tengo honor... Has de saber, que yo no hablo nunca en vano. Si digo algo, lo respaldo con acciones. Pero vos, vos no sos un verdadero Yotsuki. No tienes ninguna verdad, no hay huellas atrás de ti. Así como sueltas injurias contra mí, ni siquiera tienes la digndad Yotsuki de aceptar el desafío de un rival.
—Eres tú el que ha estado faltando el respeto desde un inicio. Has juzgado mi cantar desde tu ignorancia y tú retrógada manera de pensar. ¿Acaso vos si sabes lo que es llevar cicatrices de batalla? ¿Acaso vos eres capaz de hacer resonar a las mil aves? Has asumido que yo no lo sé, ¿vos sí? Pero sobre todo, has asumido que yo no tengo honor... Has de saber, que yo no hablo nunca en vano. Si digo algo, lo respaldo con acciones. Pero vos, vos no sos un verdadero Yotsuki. No tienes ninguna verdad, no hay huellas atrás de ti. Así como sueltas injurias contra mí, ni siquiera tienes la digndad Yotsuki de aceptar el desafío de un rival.