11/04/2019, 15:59
"Oh por Amenokami. Y luego a mí me dicen estrambótico." Si se la pasaba todo el tiempo entre tumbas, ruinas y demás no le extrañaba para nada que ahora luciese tan mugrienta. Daruu se puso cómplice con la chica, ante lo cual Rōga decidió seguirle el juego pese a que no estaba muy convencido de que la cazafantasmas realmente pudiese encontrar tal cosa cómo la actividad paranormal.
Estaba atento a la conversación, hasta que la vista se desvió hace él y su nombre fue solicitado.
"Bienaventurados aquellos que desean conocer a lobo. ¡Dichosos porque raramente habrá una gloriosa presentación dos veces en un sólo día!" Y ahí iba de nuevo.
Se tiró de rodillas al suelo, cruzó sus brazos delante de sí formando una equis y encorvó los dedos anular y corazón hacia la palma, sosteniéndolos con el pulgar. Ladeó la cabeza para que le viesen de perfil mientras dejaba que la lumbrera de las llamas le diera el toque final al espectáculo.
—Yo soy, King Rōga~ sonrío enseñando su blanca dentadura.
Dio un solo salto, volviendo a la "normalidad", y se cruzó de brazos mientras se acercaba al montón de aparatos que tenía a su lado, agachándose para verlos de cerca.
—¿Usas estos chunches para buscar esa actividad?— los observó con detalle, pero no quiso tocar. —Mira que mi papá es un científico y tiene muchos aparatos raros, pero estos que tienes aquí no se asemejan en nada. ¿Cómo es que funcionan?— Se quedaría esperando a la respuesta de la muchacha antes de continuar con su interrogatorio. —Imagino que recién estabas empezando tu ronda y no has encontrado nada aún. Después de todo, se dice que las voces susurrantes de este sitio sólo son audibles a la media noche.
No hablaba porque creyese que de verdad había fantasmas, pero le empezaba a preocupar que los verdaderos profanadores de tumbas la encontraran y pudiesen hacerle daño. "Puede ser un sitio muy peligroso para ella."
Estaba atento a la conversación, hasta que la vista se desvió hace él y su nombre fue solicitado.
"Bienaventurados aquellos que desean conocer a lobo. ¡Dichosos porque raramente habrá una gloriosa presentación dos veces en un sólo día!" Y ahí iba de nuevo.
Se tiró de rodillas al suelo, cruzó sus brazos delante de sí formando una equis y encorvó los dedos anular y corazón hacia la palma, sosteniéndolos con el pulgar. Ladeó la cabeza para que le viesen de perfil mientras dejaba que la lumbrera de las llamas le diera el toque final al espectáculo.
—Yo soy, King Rōga~ sonrío enseñando su blanca dentadura.
Dio un solo salto, volviendo a la "normalidad", y se cruzó de brazos mientras se acercaba al montón de aparatos que tenía a su lado, agachándose para verlos de cerca.
—¿Usas estos chunches para buscar esa actividad?— los observó con detalle, pero no quiso tocar. —Mira que mi papá es un científico y tiene muchos aparatos raros, pero estos que tienes aquí no se asemejan en nada. ¿Cómo es que funcionan?— Se quedaría esperando a la respuesta de la muchacha antes de continuar con su interrogatorio. —Imagino que recién estabas empezando tu ronda y no has encontrado nada aún. Después de todo, se dice que las voces susurrantes de este sitio sólo son audibles a la media noche.
No hablaba porque creyese que de verdad había fantasmas, pero le empezaba a preocupar que los verdaderos profanadores de tumbas la encontraran y pudiesen hacerle daño. "Puede ser un sitio muy peligroso para ella."