5/11/2015, 01:47
A final de cuentas, el chico sabía hablar y no estaba tan paralizado como Noemi pensó, pero a juzgar por su habla y el rubor si que estaba algo nervioso. Eso si, con lo primero que dijo de que se había asustado el ceño de la kunoichi se frunció por una milésima de segundo. ~ ¿Me estás diciendo fea...? ~ Dijo en su cabeza mientras observaba los alrededores. ~ En medio de la aldea sería imposible esconder un cadáver... ~
Pero organizar un plan de acción para poder salirse con la suya fue completamente innecesario, gracias a ese nuevo agregado acerca de un ángel. - Joo... - Susurró Sakamoto mientras esbozaba una sonrisa y se inclinaba hacia adelante para estar a la altura, con ambas manos en su cadera. - Veo que sabes de cumplidos... - Dijo mientras inspeccionaba al chico con la mirada.
Unos instantes después de que la pregunta fuese formulada, la kunoichi terminó su evaluación visual. ~ Demasiado joven... ~ Pensaba al mismo tiempo que se enderezaba y se llevaba la diestra al hombro contrario para luego frotarse aquella zona ligeramente. - Algo... Lo suficiente para ganarte un dolor de espalda... - Respondió acompañada de una mueca de molestia. - En casos así viene bien un masaje pero... Pocos se atreven a poner un dedo sobre mi... - Agregó con su típica arrogancia y con una sonrisa en el rostro.
¿La idea? Conseguirse un masaje, simplemente eso. La espalda si bien no le dolía tanto como hizo parecer, si que sentía alguna molestia por los días que le había tocado dormir sobre el suelo y demás durante ese tiempo que estuvo vagando por ahí. ~ ¿Serás útil para algo más que cumplidos...? ~
Pero organizar un plan de acción para poder salirse con la suya fue completamente innecesario, gracias a ese nuevo agregado acerca de un ángel. - Joo... - Susurró Sakamoto mientras esbozaba una sonrisa y se inclinaba hacia adelante para estar a la altura, con ambas manos en su cadera. - Veo que sabes de cumplidos... - Dijo mientras inspeccionaba al chico con la mirada.
Unos instantes después de que la pregunta fuese formulada, la kunoichi terminó su evaluación visual. ~ Demasiado joven... ~ Pensaba al mismo tiempo que se enderezaba y se llevaba la diestra al hombro contrario para luego frotarse aquella zona ligeramente. - Algo... Lo suficiente para ganarte un dolor de espalda... - Respondió acompañada de una mueca de molestia. - En casos así viene bien un masaje pero... Pocos se atreven a poner un dedo sobre mi... - Agregó con su típica arrogancia y con una sonrisa en el rostro.
¿La idea? Conseguirse un masaje, simplemente eso. La espalda si bien no le dolía tanto como hizo parecer, si que sentía alguna molestia por los días que le había tocado dormir sobre el suelo y demás durante ese tiempo que estuvo vagando por ahí. ~ ¿Serás útil para algo más que cumplidos...? ~