18/05/2019, 23:32
La voz de un niño lo saca del trance, aunque apenas fija su atención en él. La pregunta le sorprende, como también la bandana que porta en la frente. Como no es el primer Gennin precoz que conoce, no le da demasiada importancia, aunque su actitud despreocupada y la vestimenta peculiar atraen lo suficiente su atención visual después de un par de segundos. No entiende qué tiene que ver con el atracador, pero siente que puede confiar en él.
— Buee, persigo a ese idiota porqué es un ladrón — mueve la bolsa que lleva a la espalda para que el niño le de importancia — este es parte del botín del asalto. He incapacitado a otro de los ladrones, aunque un tercero ha escapado — lo mira directamente a los ojos.Luce resignado y busca en la expresión de su interlocutor algo que lo delate. Le llama la atención que apenas vaya cubierto, ya que la tormenta ruge con fuerza y el viento se mueve caprichoso.
— Mi nombre es Kori no Galen, de Yukio — deja la bolsa en el suelo y se escucha como choca entre sí la bisutería. Algo como un cristal se quiebra dentro — Ups, vaya...
Lleva su mano a la nuca y se voltea hacia el mostrador, donde el pequeño shinobi ha tomado asiento.
— No voy a tomar nada... pero... ¿puedo pedirte un favor?
Intenta mantener la calma y sigue pensando en qué hacer con la bolsa antes de volver al salón de apuestas.
— Buee, persigo a ese idiota porqué es un ladrón — mueve la bolsa que lleva a la espalda para que el niño le de importancia — este es parte del botín del asalto. He incapacitado a otro de los ladrones, aunque un tercero ha escapado — lo mira directamente a los ojos.Luce resignado y busca en la expresión de su interlocutor algo que lo delate. Le llama la atención que apenas vaya cubierto, ya que la tormenta ruge con fuerza y el viento se mueve caprichoso.
— Mi nombre es Kori no Galen, de Yukio — deja la bolsa en el suelo y se escucha como choca entre sí la bisutería. Algo como un cristal se quiebra dentro — Ups, vaya...
Lleva su mano a la nuca y se voltea hacia el mostrador, donde el pequeño shinobi ha tomado asiento.
— No voy a tomar nada... pero... ¿puedo pedirte un favor?
Intenta mantener la calma y sigue pensando en qué hacer con la bolsa antes de volver al salón de apuestas.