27/05/2019, 12:28
Vaya, al parecer quedaba un poco de materia gris en la cabecita de la jinchuriki, ¡menos mal! Era bueno ver que no me había vuelto loco y volvíamos a coincidir en algo, pero esa sensación de que iba a morir allí abajo iba en aumento y empezaba a causar cierta ansiedad en mi cuerpo.
Esto es una locura... Esto es... ¿Quién demonios se iba a quedar aquí abajo y a preparar todo esto? Quizás sólo sean las trampas de una civilización antigua...
— ¿Y cómo diantres iba a saber yo eso? Espera, espera...
Me había iluminado, y las conclusiones de aquella iluminación no me gustaban ni un puto pelo. Se me había quedado la piel de la cara tan blanca como los huesos.
«Podría... ¿Podría ser...?»
Yota-san, Kumopansa, ¿estáis bien? Creo que deberíamos continuar... pero tenemos que tener mucho cuidado. No creo que esa fuera la única trampa que hay aquí abajo...
— No, osea... quiero decir... cuando te topaste con el General ese de mierda — decía entre balbuceos de puro terror — Pudo saber que eras una jinchuriki con tu mera presencia, ¿Verdad?
Había bajado ya de esa pared que había usado de salvoconducto previamente, y la araña también.
— Tío, eres un puto paranoico, ¿Lo sabías?
— Cierra la bocaza
Me acerqué a Ayame y la agarre de los hombros, sacudiendola un poco.
— ¡¿Fue así o no?!
Esto es una locura... Esto es... ¿Quién demonios se iba a quedar aquí abajo y a preparar todo esto? Quizás sólo sean las trampas de una civilización antigua...
— ¿Y cómo diantres iba a saber yo eso? Espera, espera...
Me había iluminado, y las conclusiones de aquella iluminación no me gustaban ni un puto pelo. Se me había quedado la piel de la cara tan blanca como los huesos.
«Podría... ¿Podría ser...?»
Yota-san, Kumopansa, ¿estáis bien? Creo que deberíamos continuar... pero tenemos que tener mucho cuidado. No creo que esa fuera la única trampa que hay aquí abajo...
— No, osea... quiero decir... cuando te topaste con el General ese de mierda — decía entre balbuceos de puro terror — Pudo saber que eras una jinchuriki con tu mera presencia, ¿Verdad?
Había bajado ya de esa pared que había usado de salvoconducto previamente, y la araña también.
— Tío, eres un puto paranoico, ¿Lo sabías?
— Cierra la bocaza
Me acerqué a Ayame y la agarre de los hombros, sacudiendola un poco.
— ¡¿Fue así o no?!
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa