4/06/2019, 13:28
Mientras Ayame elucubraba y trataba de trazar un plan para salvar mis pelotas y la sangre que todavía permanecía en mi cuerpo antes de que ésta saliese por completo, yo seguía revolviendo de puro dolor. Escuchaba las voces de Ayame y Kumopansa, claro que las escuchaba. Pero no las entendía. Ese puto dolor no me lo permitía. Bueno, el dolor mezclado con la rabia que aquel incidente había hecho emanar de lo más profundo de mi ser.
—Ku... ¡Kumopansa! Dicen que la tela de araña es más fuerte que el acero... ¿Puedes usarla para vendar sus heridas?
— Esto... como podria decirtelo... — decía el arácnido con pesar — Dejemoslo en que no soy perfecta
En efecto, no lo era. Por muy animal ninja que fuese y por muy araña que fuese, era incapaz de hilar una sola telaraña. A parte de que no eran tan fuertes como insinuaba la amejin. Eran resistentes y flexibles pero, ¿tan fuertes? bueno, si les infundias chakra talk y como lo hacia yo... En ese caso, entonces igual si, pero una telaraña normal... No, esas no.
— Vas a tener que pensar en otra cosa
Después de los primeros instantes de dolor, trataba de controlarme. esos punzazos habían amainado un poco y era capaz de incorporarme, aunque sin levantarme del suelo.
— Ayame, escucha — dije llamando la atención de la chica — Tienes que encontrar a ese hijo de la gran puta y matarlo, ¿lo harás?
Entre punzadas de dolor tuve que pedirle aquello de forma totalmente egoísta sin pensar en absolutamente nada más. Siquiera ne salvarme. Aunque aquello empezaba a resultar complicado de verdad a aquellas alturas de la película.
—Ku... ¡Kumopansa! Dicen que la tela de araña es más fuerte que el acero... ¿Puedes usarla para vendar sus heridas?
— Esto... como podria decirtelo... — decía el arácnido con pesar — Dejemoslo en que no soy perfecta
En efecto, no lo era. Por muy animal ninja que fuese y por muy araña que fuese, era incapaz de hilar una sola telaraña. A parte de que no eran tan fuertes como insinuaba la amejin. Eran resistentes y flexibles pero, ¿tan fuertes? bueno, si les infundias chakra talk y como lo hacia yo... En ese caso, entonces igual si, pero una telaraña normal... No, esas no.
— Vas a tener que pensar en otra cosa
Después de los primeros instantes de dolor, trataba de controlarme. esos punzazos habían amainado un poco y era capaz de incorporarme, aunque sin levantarme del suelo.
— Ayame, escucha — dije llamando la atención de la chica — Tienes que encontrar a ese hijo de la gran puta y matarlo, ¿lo harás?
Entre punzadas de dolor tuve que pedirle aquello de forma totalmente egoísta sin pensar en absolutamente nada más. Siquiera ne salvarme. Aunque aquello empezaba a resultar complicado de verdad a aquellas alturas de la película.
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa