14/12/2019, 22:15
—En un momento les traigo su pedido— Anotó la muchacha con algo de inseguridad y luego se dió la vuelta, dejando a los dos genin a su rollo.
El Yotsuki se acomodó recostándose en el asiento y cruzando la pierna apoyando el tobillo sobre la rodilla contraria. Tenía mucha confianza en que nadie iba a reprocharle la actitud altiva que solía mostrar.
—Mi hablar es cosa de familia, pero explicarlo por enésima vez ya me da pereza...— Siempre era muy orgulloso respecto a la tradición de su clan pero incluso él podía aburrirse de presumir.
Lo que sí, la puya a su fama le cayó en un sitio donde era mejor no tocar. No era tan volátil como para explotar ahí mismo, pero si le molestaba que apuntaran a una de las cosas que eran su orgullo. Aún así, respondió algo calmado... a su manera.
—Oeh oeh, Amegakure no se hizo en un día. A decir verdad no es nada fácil este rubro, en especial cuando tienes que compaginarlo con el oficio ninja— Se levantó las gafas para mostrar su afilada mirada. —A decir verdad, tenía planes de presentarme a un Festival Musical allá en la capital del País del Fuego, sin embargo justo durante esas fechas me fui de misión a Yukio. Quiera que no sin billete no se vive, pero una cosa quita el tiempo de la otra. Estuve de hecho esforzándome mucho para el evento del Tanzaku y hay final sirvió de ni mierda. Tendré que esperarme al otro año, aunque organizar la agenda me está costando— No quería que sonara a excusa, pero tampoco quería sacar a relucir su lado más agresivo aún.
El Yotsuki se acomodó recostándose en el asiento y cruzando la pierna apoyando el tobillo sobre la rodilla contraria. Tenía mucha confianza en que nadie iba a reprocharle la actitud altiva que solía mostrar.
—Mi hablar es cosa de familia, pero explicarlo por enésima vez ya me da pereza...— Siempre era muy orgulloso respecto a la tradición de su clan pero incluso él podía aburrirse de presumir.
Lo que sí, la puya a su fama le cayó en un sitio donde era mejor no tocar. No era tan volátil como para explotar ahí mismo, pero si le molestaba que apuntaran a una de las cosas que eran su orgullo. Aún así, respondió algo calmado... a su manera.
—Oeh oeh, Amegakure no se hizo en un día. A decir verdad no es nada fácil este rubro, en especial cuando tienes que compaginarlo con el oficio ninja— Se levantó las gafas para mostrar su afilada mirada. —A decir verdad, tenía planes de presentarme a un Festival Musical allá en la capital del País del Fuego, sin embargo justo durante esas fechas me fui de misión a Yukio. Quiera que no sin billete no se vive, pero una cosa quita el tiempo de la otra. Estuve de hecho esforzándome mucho para el evento del Tanzaku y hay final sirvió de ni mierda. Tendré que esperarme al otro año, aunque organizar la agenda me está costando— No quería que sonara a excusa, pero tampoco quería sacar a relucir su lado más agresivo aún.