25/12/2019, 01:42
Daigo asintió. Definitivamente tenía que visitar a ese Toru, pues todavía tenía preguntas que necesitaban respuestas.
El joven genin solo pudo presenciar la emotiva despedida entre madre e hija sin poder hacer nada al respecto.
Se giró hacia la puerta una vez Kasaru se había preparado y se dio dos golpecitos en la cara. Él también tenía que prepararse, pues todo dependería de como se desenvolviera la interacción que estaba a punto de ocurrir.
—¡Ya voy, ya voy! —dijo acercándose a la puerta.
Cuando el chico abrió la puerta, quienes se hallaban al otro lado se encontrarían con un Daigo recién despertado y ligeramente irritado por la situación.
—¿Pero esto a qué se debe?
El joven genin solo pudo presenciar la emotiva despedida entre madre e hija sin poder hacer nada al respecto.
Se giró hacia la puerta una vez Kasaru se había preparado y se dio dos golpecitos en la cara. Él también tenía que prepararse, pues todo dependería de como se desenvolviera la interacción que estaba a punto de ocurrir.
—¡Ya voy, ya voy! —dijo acercándose a la puerta.
Cuando el chico abrió la puerta, quienes se hallaban al otro lado se encontrarían con un Daigo recién despertado y ligeramente irritado por la situación.
—¿Pero esto a qué se debe?
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.