20/01/2020, 12:47
En cuanto Daigo abrió la puerta y vio a Kenzou, sonriendo como siempre y con una humeante taza de té en sus manos, se disiparon todas sus dudas.
¿A qué le tenía miedo? ¡Era Moyashi Kenzou! Un padre para todo el mundo en Kusagakure, que no solo hacía siempre lo correcto, sino que era comprensivo y se preocupaba por sus hijos por encima de todo.
Seguro que todo estaría bien.
—¡Sí, por favor! —respondió alegre ante el ofrecimiento de su Kage, aunque sabía que no podía ni pensar en beber eso hasta dentro de dos días como poco—. Es usted muy amable.
¿A qué le tenía miedo? ¡Era Moyashi Kenzou! Un padre para todo el mundo en Kusagakure, que no solo hacía siempre lo correcto, sino que era comprensivo y se preocupaba por sus hijos por encima de todo.
Seguro que todo estaría bien.
—¡Sí, por favor! —respondió alegre ante el ofrecimiento de su Kage, aunque sabía que no podía ni pensar en beber eso hasta dentro de dos días como poco—. Es usted muy amable.
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.