31/01/2020, 00:31
Una mañana cualquiera en el centro neurálgico del País de la Espiral. Aquel fue el típico día en el que un buen par de gennins habían elegido para debutar en las labores de todo ninja. En definitiva, ir a pedir la primera misión con los clásicos nervios y aquel maremoto de mariposas en el estómago.
La primera en llegar fue la joven Hana que rápidamente acudió hasta el escritorio donde se escondía la apuesta Uzumaki Kiyomi con sus rojizos cabellos sueltos y bailando al son de los movimientos que realizaba su cabeza.
— Buenos días, vengo a por mi primera misión.
Aquella vocecita capturó la atención de Kiyomi, la cual alzó sus dos ojos de color caramelo hasta la altura de la cabecita de la gennin. Pero antes de que la Uzumaki pudiese decir nada, llegó la última gran apuesta del clan Nara, el prometedor Nara Daisuke que no tardó en revelar que el motivo de su visita era el mismo.
- Oh, lo siento, no quería molestar. dijo el muchacho, mostrando los modales que se alzaban como principal valor de la academia del remolino. Venía a pedir mi primera misión de rango D, si no era mucha molestia.
Kiyomi se recogió sus cabellos en una coleta mientras alternaba su atención entre uno y otro gennin a medida que recordaba a sus polluelos.
— Oh, buenos días, chicos. La verdad es que creo que si que tengo algo, ¿es la primera misión? — respondió la Uzumaki con su especial afecto por los chavales. — No será un problema que os haga trabajar juntos, ¿no?
La pelota está en el tejado de los gennins.
![[Imagen: K1lxG4r.png]](https://i.imgur.com/K1lxG4r.png)
![[Imagen: dlinHLO.png]](https://i.imgur.com/dlinHLO.png)
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa