10/02/2020, 12:46
Eri siguió al dueño que cerró el local para poder guiarlos sin tener miedo de que alguien viniera en su ausencia y pronto se vio como guía de los shinobi que lo ayudarían a encontrar a su animal perdido. No tardaron mucho en alejarse de Minori, justo cuando Eri y Yota se habían puesto a la par justo detrás del dueño del pequeño bar de zumos mientras éste les enseñaba dónde estaba el último lugar donde había visto a Floppy, su Husky perdido.
Hasta que llegaron a un claro del Bosque de la Hoja.
— Fue aquí —Eri miró a su alrededor, intentando encontrar algo que pudiera ayudarles a simple vista— Me temo que no os puedo decir mucho más que eso. Floppy salió disparado hacía adelante, como su hubiera visto algo o qué sé yo...
«A lo mejor vio algo que le diera miedo... O que llamase su atención para que saliera corriendo tras ello.»
— Vaya, suena algo raro... Nunca he tenido perros pero...
—Pero... —repitió ella, instando a que el Sasagani continuase con su frase inacabada, luego se giró al dueño—. Quizá salió en busca de algo o huyendo de algo, quizá deberíamos ir por donde se fue para ver si encontramos alguna pista, ¿no, Yota? —preguntó, señalando el lugar que el hombre había señalado.
Hasta que llegaron a un claro del Bosque de la Hoja.
— Fue aquí —Eri miró a su alrededor, intentando encontrar algo que pudiera ayudarles a simple vista— Me temo que no os puedo decir mucho más que eso. Floppy salió disparado hacía adelante, como su hubiera visto algo o qué sé yo...
«A lo mejor vio algo que le diera miedo... O que llamase su atención para que saliera corriendo tras ello.»
— Vaya, suena algo raro... Nunca he tenido perros pero...
—Pero... —repitió ella, instando a que el Sasagani continuase con su frase inacabada, luego se giró al dueño—. Quizá salió en busca de algo o huyendo de algo, quizá deberíamos ir por donde se fue para ver si encontramos alguna pista, ¿no, Yota? —preguntó, señalando el lugar que el hombre había señalado.