16/05/2020, 06:24
Era. Efectivamente.
Hiken Yatagama —ese era su nombre completo—. había perdido un sólo combate en toda su carrera. Eso también sin excepción. Quizás Daigo se lo había perdido, y resultaba bastante extraño que desconociera los acontecimientos de aquella disputa, sucedida hace seis meses. Fue comida para los fanáticos y la prensa durante todo este tiempo. Aún sigue siendo, de hecho, un suceso que daba mucho de qué hablar. La, finalmente, caída del gran campeón. Del hombre que resiste todos los golpes. La Roca. El Intumbable.
Yatagama miró con un palpable vacío hacia el ring. Suspiró, sabiendo que su tiempo había acabado, y no tenía que haber sido así. Si no fuera por ese desgraciado...
—Puño de Hierro, eso fue lo que pasó.
Puño de Hierro, Hiro. El actual campeón. La joven promesa, estrella en ciernes; que salió de la absoluta nada, y dominó la LKBP. Veinte años, apenas. Y aún así, logró derrotar a un Yatagama que era considerado un veterano en toda regla.
Hiken Yatagama —ese era su nombre completo—. había perdido un sólo combate en toda su carrera. Eso también sin excepción. Quizás Daigo se lo había perdido, y resultaba bastante extraño que desconociera los acontecimientos de aquella disputa, sucedida hace seis meses. Fue comida para los fanáticos y la prensa durante todo este tiempo. Aún sigue siendo, de hecho, un suceso que daba mucho de qué hablar. La, finalmente, caída del gran campeón. Del hombre que resiste todos los golpes. La Roca. El Intumbable.
Yatagama miró con un palpable vacío hacia el ring. Suspiró, sabiendo que su tiempo había acabado, y no tenía que haber sido así. Si no fuera por ese desgraciado...
—Puño de Hierro, eso fue lo que pasó.
Puño de Hierro, Hiro. El actual campeón. La joven promesa, estrella en ciernes; que salió de la absoluta nada, y dominó la LKBP. Veinte años, apenas. Y aún así, logró derrotar a un Yatagama que era considerado un veterano en toda regla.