21/09/2020, 01:26
— Lo siento, Kinumi-chan. Ahora seguro que vendrán muchos más. —Se disculpó mientras tomaba la vaina de su wakizashi, sabiendo que ahora todo iba a ser un poco más difícil—. ¿Me apoyarías desde aquí?
Dicho aquello, la vaina de su arma se tornó negra y pesada, haciéndola tan útil y mortal como el arma original.
El chico respiró hondo antes de saltar, sosteniendo su arma improvisada con ambas manos con la intención de golpear al lobo que había sido herido con ella. Sabía bastante bien que había otro que todavía no había sido atacado, pero confiaba plenamente en que su compañera pudiera hacer algo al respecto.
Apenas caer, el Genin lanzaría otro golpe, esta vez ascendente contra el can.
Dicho aquello, la vaina de su arma se tornó negra y pesada, haciéndola tan útil y mortal como el arma original.
El chico respiró hondo antes de saltar, sosteniendo su arma improvisada con ambas manos con la intención de golpear al lobo que había sido herido con ella. Sabía bastante bien que había otro que todavía no había sido atacado, pero confiaba plenamente en que su compañera pudiera hacer algo al respecto.
Apenas caer, el Genin lanzaría otro golpe, esta vez ascendente contra el can.