11/03/2021, 14:18
— El día que Kenzō me convirtió en jinchūriki yo me intenté negar, ¿sabes? Pero no tuve mucha opción ante una orden directa. Él me habló del gran potencial que tenía y cómo una persona joven tendría más opciones de sobrevivir. Me dijo que me convertiría en su jaula para el resto de los días de mi vida. Que sería un peso en la balanza para evitar una guerra. Me obligó a mantenerlo en secreto, para evitar que algún malvado hiciera algo contra mí. Pero creo que también era porque yo era su as en la manga, su arma en caso de que algo nos amenazara — Juro sonrió tristemente —. No me importó convertirme en un arma. Era por la villa. Me dijo que era parte de la gran familia de Kusagakure y que era como mi padre. Y yo lo sentía así.
El jinchuriki seguía haciendo saltos entre el pasado lejano y el pasado del momento sobre el que le había preguntado. Era un poco confuso, la verdad, quizás su estrategia era simplemente esa, confundirme y llevarme a su terreno para así ganarse mi favor o, al menos, que la cosa no acabase en una orgía de sangre.
— Así es, Kenzō-sama era nuestro padre — recalqué.
— El día que lo sellaron en mí, el Nanabi me habló durante unos momentos. Nada importante, pero lo noté. Sin embargo, el Morikage no me creyó. Y al final, pensé que simplemente fue un delirio. Yo creía la versión de Kenzō. Pensaba que era un monstruo irracional. — relató —. Cuando aparecieron los generales, no tuvo más remedio que aceptar que los bijuu eran seres racionales. Yo le conté todo lo que supe, con la esperanza de que él me comprendiera. Pero lo único que me dijo es que los bijuus eran monstruos y que debía evitar entrar en contacto con ellos.
Y ahora hablaba del día del sellado del Nanabi.
» No le culpo. Al fin y al cabo no sabe lo que se siente tener a uno en tu interior. Pero nunca quiso entenderlo. Y eso hizo que se abriera una brecha entre nosotros. Con el paso del tiempo yo cada vez me preguntaba más que estaba pasando en realidad en aquella guerra entre los bijuu, por qué el Gobi había rechazado a Kurama, y quién diablos era la criatura que tenía en mi interior. Pero si Kenzō se negaba a escucharme, pensé que entonces no podía si quiera contarlo
— ¿Estás intentando hacerme ver que llegasteis a las manos porque Kenzō-sama pensaba que os bijūs eran malos y tu pensabas que eran buenos?
Definitivamente, todo aquello tenía que tener alguna razón de ser, sino no estaría explayándose tanto con aquel debate moral o ético o como se le quiera llamar.
— No, espera... eso que ha dicho no es del día en el que asesinó al viejo
— ¡Vaya, no me digas! Nunca me podría haber dado cuenta por mi mismo — salté ante la intervención de Kumopansa. — Sigue, quiero saber como acaba esta historia
El jinchuriki seguía haciendo saltos entre el pasado lejano y el pasado del momento sobre el que le había preguntado. Era un poco confuso, la verdad, quizás su estrategia era simplemente esa, confundirme y llevarme a su terreno para así ganarse mi favor o, al menos, que la cosa no acabase en una orgía de sangre.
— Así es, Kenzō-sama era nuestro padre — recalqué.
— El día que lo sellaron en mí, el Nanabi me habló durante unos momentos. Nada importante, pero lo noté. Sin embargo, el Morikage no me creyó. Y al final, pensé que simplemente fue un delirio. Yo creía la versión de Kenzō. Pensaba que era un monstruo irracional. — relató —. Cuando aparecieron los generales, no tuvo más remedio que aceptar que los bijuu eran seres racionales. Yo le conté todo lo que supe, con la esperanza de que él me comprendiera. Pero lo único que me dijo es que los bijuus eran monstruos y que debía evitar entrar en contacto con ellos.
Y ahora hablaba del día del sellado del Nanabi.
» No le culpo. Al fin y al cabo no sabe lo que se siente tener a uno en tu interior. Pero nunca quiso entenderlo. Y eso hizo que se abriera una brecha entre nosotros. Con el paso del tiempo yo cada vez me preguntaba más que estaba pasando en realidad en aquella guerra entre los bijuu, por qué el Gobi había rechazado a Kurama, y quién diablos era la criatura que tenía en mi interior. Pero si Kenzō se negaba a escucharme, pensé que entonces no podía si quiera contarlo
— ¿Estás intentando hacerme ver que llegasteis a las manos porque Kenzō-sama pensaba que os bijūs eran malos y tu pensabas que eran buenos?
Definitivamente, todo aquello tenía que tener alguna razón de ser, sino no estaría explayándose tanto con aquel debate moral o ético o como se le quiera llamar.
— No, espera... eso que ha dicho no es del día en el que asesinó al viejo
— ¡Vaya, no me digas! Nunca me podría haber dado cuenta por mi mismo — salté ante la intervención de Kumopansa. — Sigue, quiero saber como acaba esta historia
![[Imagen: K1lxG4r.png]](https://i.imgur.com/K1lxG4r.png)
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