18/03/2021, 11:17
Sin duda alguna, los dos se habían realizado un examen con la mirada, tratando de recabar la mayor cantidad de información posible y no fue hasta el momento en el que el peliblanco se levantó, para dirigirse a la barra que Saori se dio cuenta de que se trataba de un shinobi.
«Vaya, qué casualidad, este viaje está plagado de encuentros inesperados.»
El joven Sarutobi pidió un refresco y la carta del lugar, para ir escogiendo su comida mientras se refrescaba el gaznate.
—Mi nombre es Sarutobi Saori. — Diría sin dar más explicaciones, dirigiéndose al chico del pelo blanco, que se dirigía a la barra a saber con qué intenciones.
Sin duda era una persona que imponía, alto, más alto que él por lo menos, y tenía un par de cicatrices, una bajo el ojo derecho y otro a la altura del pecho, visible gracias a las prendas que llevaba, lo cual tenía que ser aposta, tenía que querer que vieran aquella cicatriz, quizás para asustar, no lo sabía.
«Vaya, qué casualidad, este viaje está plagado de encuentros inesperados.»
El joven Sarutobi pidió un refresco y la carta del lugar, para ir escogiendo su comida mientras se refrescaba el gaznate.
—Mi nombre es Sarutobi Saori. — Diría sin dar más explicaciones, dirigiéndose al chico del pelo blanco, que se dirigía a la barra a saber con qué intenciones.
Sin duda era una persona que imponía, alto, más alto que él por lo menos, y tenía un par de cicatrices, una bajo el ojo derecho y otro a la altura del pecho, visible gracias a las prendas que llevaba, lo cual tenía que ser aposta, tenía que querer que vieran aquella cicatriz, quizás para asustar, no lo sabía.
Hablo / Narro / «Pienso»