11/05/2015, 17:04
Que bien me sentía, no recordaba cuando fue la última vez que abandoné la villa oculta de la Hierba, y era la primera vez que iba a abandonar el país. Estaba realmente emocionado a pesar del pateo que ya llevaba a mis espaldas, pues acababa de cruzar todo el bosque de los Hongos de lado a lado.
De repente se veía allá en el horizonte, lo que vendría a ser una gran estructura. Deduje que se trataría del puente Kannabi y se veía realmente impresionante."Madre mia!, pedazo puente" Pensé cuando se acabó el camino y me topé delante de aquel monumental puente, que daba acceso al país de la Espiral. Comencé a caminar por él impresionado, pues no tenía ni idea de como el hombre podía realizar estructuras tan impresionantes. Lo que si sabía es que tendría que ser algo extremadamente difícil y delicado. Cualquier cálculo mal hecho y sería un puente que estaría descansando en el fondo del acantilado en el que se encuentra.
Se oía perfectamente el agua embravecida debajo de mis pies, era algo ensordecedor pues el ruido reverberaba a causa del acantilado y hacía que el sonido se solapara infinitamente. A varias decenas de metros delante mía, venía en dirección contraria alguien. Después de tanto tiempo sin cruzarme con nadie, no pude evitar la curiosidad, porque al igual que yo, era un viajero solitario.
Cuando nos acercamos lo suficiente, pude apreciar que se trataba de un muchacho con una extraña melena negra, vestía una sudadera oscura y al cuello una bufanda roja. Verlo vestido así me daba una sensación de calor, pues hacía muy buen tiempo en estas épocas del año, para ir vestido con una sudadera y una bufanda.
Dejando ese detalle, quería aprovechar la oportunidad para preguntarle a aquel transeúnte si sabía si quedaba muy lejos la antigua villa de la Hoja. -Hola viajero, ¿Me permite que le haga una pregunta?. Le dije con el mapa en mano.
De repente se veía allá en el horizonte, lo que vendría a ser una gran estructura. Deduje que se trataría del puente Kannabi y se veía realmente impresionante."Madre mia!, pedazo puente" Pensé cuando se acabó el camino y me topé delante de aquel monumental puente, que daba acceso al país de la Espiral. Comencé a caminar por él impresionado, pues no tenía ni idea de como el hombre podía realizar estructuras tan impresionantes. Lo que si sabía es que tendría que ser algo extremadamente difícil y delicado. Cualquier cálculo mal hecho y sería un puente que estaría descansando en el fondo del acantilado en el que se encuentra.
Se oía perfectamente el agua embravecida debajo de mis pies, era algo ensordecedor pues el ruido reverberaba a causa del acantilado y hacía que el sonido se solapara infinitamente. A varias decenas de metros delante mía, venía en dirección contraria alguien. Después de tanto tiempo sin cruzarme con nadie, no pude evitar la curiosidad, porque al igual que yo, era un viajero solitario.
Cuando nos acercamos lo suficiente, pude apreciar que se trataba de un muchacho con una extraña melena negra, vestía una sudadera oscura y al cuello una bufanda roja. Verlo vestido así me daba una sensación de calor, pues hacía muy buen tiempo en estas épocas del año, para ir vestido con una sudadera y una bufanda.
Dejando ese detalle, quería aprovechar la oportunidad para preguntarle a aquel transeúnte si sabía si quedaba muy lejos la antigua villa de la Hoja. -Hola viajero, ¿Me permite que le haga una pregunta?. Le dije con el mapa en mano.