5/08/2021, 13:16
—Ahora te llevaré junto a Daigo, comeremos y beberemos frente a una hoguera y nos contaremos historias de terror.
Claro que antes tenía que ocuparse de una cosa. Aquel interrogatorio le había dejado tremendamente vulnerable. Zaide llevaba meses recorriendo un camino muy peligroso. El suelo estaba tan lleno de serpientes que parecía haber caído en un plato gigantesco de fideos envenenados. A un lado, un volcán con muy mala pinta. Al otro, ojos de depredadores al acecho.
Las serpientes jugaban entre sus pies, deseosas de hincarle el diente pero lo suficientemente atemorizadas como para no hacerlo. Los depredadores le buscaban con cuidado, conocedores del peligro que representaba. Que ellos creían que representaba.
Yota no parecía haberse dado cuenta, o, de haberlo hecho, lo estaba ocultando muy bien. Tenía claro, no obstante, que cuando relatase lo ocurrido allí a Kintsugi esta sí descubriría la verdad. Sabría lo que aquel interrogatorio significaba. Y entonces las serpientes atacarían, y los depredadores buscarían sin tanto cuidado.
No podía permitírselo. Debía evitarlo a toda costa…
…y hacer que Yota olvidase todo lo que había ocurrido en aquella cueva.
Claro que antes tenía que ocuparse de una cosa. Aquel interrogatorio le había dejado tremendamente vulnerable. Zaide llevaba meses recorriendo un camino muy peligroso. El suelo estaba tan lleno de serpientes que parecía haber caído en un plato gigantesco de fideos envenenados. A un lado, un volcán con muy mala pinta. Al otro, ojos de depredadores al acecho.
Las serpientes jugaban entre sus pies, deseosas de hincarle el diente pero lo suficientemente atemorizadas como para no hacerlo. Los depredadores le buscaban con cuidado, conocedores del peligro que representaba. Que ellos creían que representaba.
Yota no parecía haberse dado cuenta, o, de haberlo hecho, lo estaba ocultando muy bien. Tenía claro, no obstante, que cuando relatase lo ocurrido allí a Kintsugi esta sí descubriría la verdad. Sabría lo que aquel interrogatorio significaba. Y entonces las serpientes atacarían, y los depredadores buscarían sin tanto cuidado.
No podía permitírselo. Debía evitarlo a toda costa…
…y hacer que Yota olvidase todo lo que había ocurrido en aquella cueva.