26/08/2021, 23:37
No era un lugar grande, así que los baños no es que fueran mixtos, es que eran los únicos que había. Antes de entrar a estos había una pequeña estancia con estanterias en ambas paredes con un enorme banco en el centro del lugar. Todo era de madera cuidadosamente barnizada para evitar que la humedad le hiciese daño alguno, ya que los vapores de los baños entraban por mucha puerta que las separase.
— Aquí estoy. — anunció al entrar detrás de Lyndis. — Uy, pero ¿qué haces aún vestida?
Dejó unas toallas, un albornoz y un kimono en el banco al lado de la kunoichi y se acercó a ella. Parecía tener intención de ayudarla a desvestirse, pero cuando estuvo a escasa distancia de Lyndis, ésta sintió un pinchazo en el antebrazo. Al girarse, vería a Sasu sujetando un senbon ensangrentado. Empezaría a notar una extraña sensación de hormigueo por el brazo y antes de poder reaccionar, sentiría que el brazo derecho dejaba de responderle.
Sasu se quedaría ahí mirándola como si ya hubiese hecho su trabajo, mirándola con la mayor expresión de asco que Lyndis había visto en meses.
— Aquí estoy. — anunció al entrar detrás de Lyndis. — Uy, pero ¿qué haces aún vestida?
Dejó unas toallas, un albornoz y un kimono en el banco al lado de la kunoichi y se acercó a ella. Parecía tener intención de ayudarla a desvestirse, pero cuando estuvo a escasa distancia de Lyndis, ésta sintió un pinchazo en el antebrazo. Al girarse, vería a Sasu sujetando un senbon ensangrentado. Empezaría a notar una extraña sensación de hormigueo por el brazo y antes de poder reaccionar, sentiría que el brazo derecho dejaba de responderle.
Sasu se quedaría ahí mirándola como si ya hubiese hecho su trabajo, mirándola con la mayor expresión de asco que Lyndis había visto en meses.