4/09/2021, 11:25
Lyndis arqueó una ceja, sorprendida. ¿Quién en su sano juicio haría justo eso? En el caso de ser ella una heroína él la catalogo, y dejarla en un estado al borde de la muerte. ¿Para qué coño iba a contarle sus planes mientras le dejaba recuperar el aliento o que llegara la ayuda? Solo un imbécil con un ego superior y excesivamente creído haría algo así. Aunque fuera una persona fría y calculadora, debería tener un exceso de confianza como para llegar a hacer algo así.
— ¿Y yo porque coño te iba a contar a ti algo? ¿Tienes problemas en casita con papa y mama y necesitas un hombro sobre el que llorar? — bufó sonriente, para después seguir un rato más con las bravuconadas. — Oh no. Espera. Me tachaste a mí de heroína por ser una Kuniochi y que tú eres un villano. Ya sé. Unos ninjas mataron a tus seres queridos en una misión por accidente pensando que eran su objetivo y desde entonces decidiste tomar represalias contra ellos ¿es eso? ¿Me estoy acercando? ¿O simplemente eres un payaso de esos de ojos rojos danzantes que esta obsesionado con la venganza? — Pero este no dejaba de desviar la mirada sobre la chica a su espalda. — Que estás hablando conmigo, imbécil
Intentó darle conversación, mientras intentaba enfocarse en buscar cualquier respuesta de su brazo. El más mínimo estimulo. Pero fue en vano. Durante todo el rato permanecería en guardia, preparada para contraatacar si notaba cualquier acción amenazante sobre ella.
— ¿Y yo porque coño te iba a contar a ti algo? ¿Tienes problemas en casita con papa y mama y necesitas un hombro sobre el que llorar? — bufó sonriente, para después seguir un rato más con las bravuconadas. — Oh no. Espera. Me tachaste a mí de heroína por ser una Kuniochi y que tú eres un villano. Ya sé. Unos ninjas mataron a tus seres queridos en una misión por accidente pensando que eran su objetivo y desde entonces decidiste tomar represalias contra ellos ¿es eso? ¿Me estoy acercando? ¿O simplemente eres un payaso de esos de ojos rojos danzantes que esta obsesionado con la venganza? — Pero este no dejaba de desviar la mirada sobre la chica a su espalda. — Que estás hablando conmigo, imbécil
Intentó darle conversación, mientras intentaba enfocarse en buscar cualquier respuesta de su brazo. El más mínimo estimulo. Pero fue en vano. Durante todo el rato permanecería en guardia, preparada para contraatacar si notaba cualquier acción amenazante sobre ella.