12/09/2021, 23:48
Paralizada en el acto, temblaría mientras intentaba liberarse haciendo uso de todas sus fuerzas. Ni siquiera su golpe pudo llegar a conectar, por lo que la rabia contenida en su puñetazo la hacía temblar más. Por si no fuera poco, encima las amenazas no terminaron ahí, llegando a mencionar a una querida conocida. Al escuchar el nombre de Ranko, las pupilas de Lyndis parecieron haber casi desaparecido, por lo que la expresión "ciega de furia" parecía irle como anillo al dedo.
— ¿Que tiene que ver ella en esto? — los dientes de la peligrisacea se mostraban afilados y agudos, igual de amenazantes que su mirada. Estaba completamente fuera de sí. — Como le pongas un dedo encima, no vivirás para contarlo. Te romperé todos los huesos y te mataré; y luego bajaré a cualquier puto infierno para volver a matarte
Todo el cuerpo de la chica estaba en completa tensión, por lo que si aquellas sombras dejaban de hacer fuerza sobre ella, se abalanzaría a la mínima oportunidad sobre él.
— ¿Que tiene que ver ella en esto? — los dientes de la peligrisacea se mostraban afilados y agudos, igual de amenazantes que su mirada. Estaba completamente fuera de sí. — Como le pongas un dedo encima, no vivirás para contarlo. Te romperé todos los huesos y te mataré; y luego bajaré a cualquier puto infierno para volver a matarte
Todo el cuerpo de la chica estaba en completa tensión, por lo que si aquellas sombras dejaban de hacer fuerza sobre ella, se abalanzaría a la mínima oportunidad sobre él.