12/10/2021, 16:43
Como toda una maestra, Saki evadió la pregunta y contraatacó con las propias.
—Eh... Yo... Bueno, estuve muy ocupada escribiendo algunas estrofas y... Cuando me di cuenta ya era de noche y no pude... ¡Ayayay! —Suzume chilló cuando su senpai le pellizcó, aunque evidentemente estaba exagerando y no le dolía tanto —. Eh... Le-Leí la contraportada de los libros ¿Eso cuenta?
Con el rostro apresado por la morena, Suzume sonrió, intentando hacer ojitos tiernos mientras rascaba con un dedo el dorso de la mano que le pellizcaba.
—Eh... Yo... Bueno, estuve muy ocupada escribiendo algunas estrofas y... Cuando me di cuenta ya era de noche y no pude... ¡Ayayay! —Suzume chilló cuando su senpai le pellizcó, aunque evidentemente estaba exagerando y no le dolía tanto —. Eh... Le-Leí la contraportada de los libros ¿Eso cuenta?
Con el rostro apresado por la morena, Suzume sonrió, intentando hacer ojitos tiernos mientras rascaba con un dedo el dorso de la mano que le pellizcaba.