2/02/2022, 20:26
No pude contestarle. Sus palabras palabras habían sido como una patada en el estomago, que si ya estaba revuelto por la situación, ahora era peor. ¿Que no tenia familia de la que despedirse? ¿Que le habia pasado con su mujer? ¿Se habían separado? O peor...
Tampoco le pregunté. No creí que fuera ni el momento ni el lugar para hacer esas preguntas. O tal vez sí, pero no las palabras no querían salirme. No estaba siendo un buen día, aunque por suerte habia tenido un pequeño gran rayo de luz. Me senté al lado de Katsudon y esperé por otro milagro.
Un milagro que no sucedió. Anocheció y Gyūki no había aparecido. Desperté a Katsudon dándole unos golpecitos en el hombro.
—Tenemos que irnos mientras uzushigakure duerme. — Aún había guardias, pero teniamos un Jounin, seguro que podiamos salir con alguna excusa. —Primero tenemos que pasar por la forja a por unas cosillas, prepararé equipo por si ibamos a rescatar a la madre de Yuuna, nada especial, pero repliqué las bandanas del copo de nieve por si tocaba infiltrarnos. —Y siendo ellos dos solos, seria mejor idea tratar de infiltrarse que lanzarse de cabeza al peligro. —Además, si la atrapan y la encierran en vez de... En fin, podemos colarnos y liberarla. —Asumiendo, claro, que no llegaban a encontrarsela por el camino, aunque teniendo en cuenta los tiempos, lo dudaba mucho. —También había preparado equipo para Gyūki, pero... Bueno, se lo lanzaré al agua para que se lo encuentre, no se si volveré a verlo.
O mejor dicho, no sabia si algún dia volvería a Uzushiogakure. La intención de Yuuna parecia ser no volver, quedarse allí a sustituir a su madre. Lo entendía, probablemente en su posición, yo haría lo mismo. Y mi intención era seguirla. Allá donde fuera. Si ella queria quedarse allí, yo me quedaría a su lado. Hacía tiempo que había tomado aquella decisión.
—Luego... —Robaremos. —Tomaremos prestado un barco, y nos echaremos a la mar.
Tampoco le pregunté. No creí que fuera ni el momento ni el lugar para hacer esas preguntas. O tal vez sí, pero no las palabras no querían salirme. No estaba siendo un buen día, aunque por suerte habia tenido un pequeño gran rayo de luz. Me senté al lado de Katsudon y esperé por otro milagro.
Un milagro que no sucedió. Anocheció y Gyūki no había aparecido. Desperté a Katsudon dándole unos golpecitos en el hombro.
—Tenemos que irnos mientras uzushigakure duerme. — Aún había guardias, pero teniamos un Jounin, seguro que podiamos salir con alguna excusa. —Primero tenemos que pasar por la forja a por unas cosillas, prepararé equipo por si ibamos a rescatar a la madre de Yuuna, nada especial, pero repliqué las bandanas del copo de nieve por si tocaba infiltrarnos. —Y siendo ellos dos solos, seria mejor idea tratar de infiltrarse que lanzarse de cabeza al peligro. —Además, si la atrapan y la encierran en vez de... En fin, podemos colarnos y liberarla. —Asumiendo, claro, que no llegaban a encontrarsela por el camino, aunque teniendo en cuenta los tiempos, lo dudaba mucho. —También había preparado equipo para Gyūki, pero... Bueno, se lo lanzaré al agua para que se lo encuentre, no se si volveré a verlo.
O mejor dicho, no sabia si algún dia volvería a Uzushiogakure. La intención de Yuuna parecia ser no volver, quedarse allí a sustituir a su madre. Lo entendía, probablemente en su posición, yo haría lo mismo. Y mi intención era seguirla. Allá donde fuera. Si ella queria quedarse allí, yo me quedaría a su lado. Hacía tiempo que había tomado aquella decisión.
—Luego... —Robaremos. —Tomaremos prestado un barco, y nos echaremos a la mar.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)